Se trata de dos jóvenes de 19 y 21 años, de apellidos Martinez y Verdinelli. Estaban detenidos en la Jefatura Departamental de Gualeguaychú desde el 1° de enero por robo en flagrancia, a la espera del juicio.
Dos detenidos se fugaron en plena siesta dominguera de una celda policial. Los mismos habrían abierto el candado de la celda. Luego desde un pasillo sacaron una chapa del techo y por allí habrían escapado por calle República Oriental.
A pocas cuadras del lugar, robaron una moto, que luego dejaron abandonada en la zona de calles 1° de Mayo y Salaberry, al norte de la ciudad de Gualeguaychú.
Mientras eran intensamente buscados por personal policial que trabajaba en las cercanías del hallazgo de la moto, se recibió también la colaboración de vecinos de la zona donde habitualmente se manejaban los prófugos cuando aún estaban en libertad.
Se desconoce si Martínez y Verdinelli habían fabricado algún elemento con el que abrieron el candado. Se investigará también si contaron con la ayuda de personal de la institución.
El guardia de las celdas se encontraba en su lugar, una especie de oficina en la que deben permanecer para dar cierta intimidad a los detenidos. Desde allí, no se habría escuchado ningún ruido extraño ni tampoco los otros detenidos habrían colaborado para dar alguna información, publicó Maximaonline.