Un nuevo método de estafas se descubrió en Paraná por la denuncia de un comerciante que advirtió que pretendían engañarlo las mismas personas por segunda vez y llamó a la Policía. En el procedimiento detuvieron a dos jóvenes que ya habrían concretado el mismo ardid varias veces anteriormente con otros negocios damnificados.
Según se informó a UNO, el lunes el dueño de una carnicería ubicada en calles General Urquiza y Presidente Perón recibió un encargue de mercadería a través de la aplicación Pedidos Ya, una serie de cortes de carne por un monto de 30.000 pesos. Unos minutos después, llegó el motomandados y se llevó los productos cárnicos. Más tarde, el comerciante advirtió que la compra había sido cancelada luego de la entrega del pedido.
Cuatro días después, los estafadores se engolosinaron y fueron por más: realizaron otro pedido y el carnicero advirtió que era la misma persona la que estaba del otro lado de la aplicación. Entonces, procedió normalmente pero llamó a la División Robos y Hurtos de la Policía para que actúen ante el intento de estafa.
De este modo, este viernes los efectivos policiales se hicieron presentes en el comercio y, al llegar el motomandados que iba con un acompañante, ambos fueron detenidos. No se trataría de los cadetes sino de quienes cometían la maniobra.
En el lugar, los uniformados secuestraron la moto Honda XR Rally, así como los elementos que llevaban consigo los motociclistas: una notebook, un teléfono celular y cuatro chips, los cuales se cree que cambiaban para ir cometiendo las distintas estafas con diferentes identidades.
Se puso toda esta situación en conocimiento de la Fiscalía, que ordenó el traslado de los dos sospechosos a la Alcaldía de Tribunales en calidad de detenidos.
UNO
