Las tarifas siguen trepando por encima de la inflación y de los salarios. Este mes llegaron las boletas de la primera etapa de subas
Cuando empiezan a golpear fuerte en los ingresos de cada uno de los hogares la primera etapa de los aumentos de las tarifas de los servicios públicos, la puesta en vigencia desde el jueves 1º de febrero, de las nuevas tarifas para los servicios de gas natural y energía eléctrica, pone más presión sobre la inflación y al mismo tiempo, licúa el cada vez más el achicado poder adquisitivo.
De acuerdo con las resoluciones del gobierno nacional, tras las subas autorizadas para ambos servicios públicos, en diciembre, por 20% en el caso de la luz y de un 19% en el gas domiciliario –mínimos–, este mes se incorporará otro 15% de piso de ajuste, que estará incluido en boletas de los meses de marzo y abril.
En estos días de verano, los usuarios notaron la mayor variación en las boletas de energía eléctrica, por el mayor consumo a raíz del calor. Los incrementos en el servicio de gas natural se sentirán más en la temporada otoño-invierno, aunque el nuevo cuadro tarifario ya lo padecen los hogares de menores recursos, que deben abonar las garrafas de 10 kilogramos a un costo de 300 pesos
Servicios cada vez más caros, sin grandes o notables mejoras, y salarios congelados desde los últimos acuerdos paritarios, que fueron superados ampliamente por la inflación.
Estos aumentos previstos en forma escalonada, entre diciembre y febrero, no serán los únicos en el inicio de año, ya que desde el Ministerio del Energía de la Nación ya trascendió la decisión de retocar otros componentes de la tarifa, particularmente en el caso del precio del gas en boca de pozo, comentó ayer a UNO el defensor del Pueblo de Paraná, Luis Garay.
El funcionario recordó que en el caso de la tarifa eléctrica, la boleta está compuesta por tres componentes: el valor de las distribuidoras, el precio mayorista de la energía –que lo fija la Compañía Administradora del Mercado Mayoristas Eléctrico SA (Cammesa)– y la carga impositiva.
A fin de año, Nación modificó los precios mayoristas. Si bien en cada decisión se fija un porcentual de variación, una multiplicidad de ítems impositivas también varían, lo que termina teniendo un impacto aún mayor en las boletas de los usuarios.
En el caso de la provincia, aún no hay un pedido de modificación de tarifa, por parte de las distribuidoras, que debe hacerse mediante audiencia pública. Rige, en cambio, una actualización trimestral por inflación.
En el caso del gas natural, el defensor del Pueblo precisó que la tarifa está compuesta por el costo de extracción de gas en boca de pozo, el transporte, la distribución y la carga impositiva. Ello dificultad la comunicación clara de cada aumento que fija el Gobierno, en las boletas; el usuario no alcanza a dimensionar o medir cada autorización, hasta que no recibe la boleta.
Y en el marco de la política de aumento de tarifas, y de eliminación de subsidios, se estima que en las próximas semanas, el gobierno nacional impulse un nuevo aumento en el precio del gas en boca de pozo. Se trata del componente que explica el 70% de lo que paga un consumidor,. y que en dos años ya aumentó más del 200%.
Garay confirmó a UNO que en los próximos días se firmará un convenio entre la asociación que reúne a todos los defensores del Pueblo del país, y el Ente Nacional Regulador de Gas (Enargas). Eso permitirá que en Paraná, la Defensoría del Pueblo actúe como agente de precalificación de los beneficiarios de la tarifa social del gas natural. Hay que recordar que actualmente, el Enargas –a nivel provincial–, solo tiene sede en Concordia.
«Para acceder al beneficio de la tarifa social en el servicio de energía eléctrica, aconsejamos a los usuarios a concurrir al Ente Provincial Regulador de Energía (EPRE), a la empresa Energía de Entre Ríos SA (Enersa) o cada una de las cooperativas eléctricas distribuidas en territorio entrerriano.
Por último, ante la consulta de UNO, reconoció que en la Defensoría, en los primeros días del año solo han recibido reclamos por los aumentos de luz que comenzaron a llegar desde los primeros días de enero. «En el caso de los incrementos del gas natural, los usuarios lo percibirán con mayor notoriedad cuando el servicio tenga mayor consumo, a partir de abril», indicó.
Con impacto dispar según el momento del año
En la tarifa residencial, los aumentos autorizados por el gobierno nacional para el mercado mayorista, se trasladó en más de un 35% promedio: cerca del 20% a partir de diciembre, y otro 15% desde febrero. Se trata de estimaciones, ya que el tipo de categoría de usuario, el consumo, el posible ahorro o mayor consumo en comparación con el mismo período de 2015, determina distintos niveles de impacto en las boletas.
Algo similar ocurre con la tarifa del gas natural, en cuanto a la metodología y a los porcentuales. La diferencia reside en el bolsillo: el consumo de este suministro, durante el verano, se reduce considerablemente; el gasto en calefacción de los meses de invierno disparará los valores de las boletas, del mismo modo que está ocurriendo por estos días con el consumo eléctrico. (UNO)