El nene de poco más de un año que el viernes cayó a una pileta en Pueblo Belgrano y debió ser internado en Paraná. Afirman que las tareas de RCP le salvaron la vida. El pequeño Timoteo podría recibir el alta entre hoy y el lunes.
«Creo que un segundo más y ya se nos iba, pero justamente por la gracia de Dios salió adelante y estamos eternamente agradecidos todos», declaró Daniel Schneider, el padre de Timoteo, el nene de poco más de un año que el viernes cayó al agua y por los trabajos de RCP pudo salvarse.
Timoteo pudo ser víctima de una fatalidad, de esos accidentes domésticos que ocurren en un segundo y se lamentan el resto de la vida, pero el rescate a tiempo de los padres que lo encontraron flotando en una pileta en Pueblo Belgrano, el rápido traslado de los policías que en el camino hicieron Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y la atención en la Guardia del Hospital Centenario, fueron decisivos para que hoy todo quede en una fea anécdota
SOCIEDAD
Bebé cayó a una pileta y debió ser derivado de urgencia de Gualeguaychú a Paraná
El viernes por la tarde los funcionarios de la Comisaría Quinta, el oficial Nery Frías y el sargento Lucas Chesini, los mismos que en marzo debieron actuar en una tragedia similar ocurrida en el predio El Descanso en Pueblo Belgrano, acudieron a una casa ubicada en calle San Salvador en donde un niño de un año había caído al agua en una pileta.
Los padres encontraron al pequeño Timoteo flotando y cuando lo sacaron estaba morado. Sus gritos alertaron a los vecinos y enseguida tomó conocimiento la Policía, pero mientras todo esto sucedía fueron los padres del niño quienes le hicieron las primeras tareas de reanimación.
Cuando los policías Frias y Chesini llegaron, decidieron rápido cargarlo en el patrullero y llevarlo. Mientras el Sargento conducía hasta el Hospital, el Oficial realizaba los trabajos de RCP. En pocos minutos atravesaron la ciudad ? con la colaboración de motos que liberaron el tránsito ? y en el nosocomio los esperaba el protocolo de emergencia para este tipo de casos.
Desde allí se decidió trasladarlo al Hospital San Roque. Iba directo a Terapia Intensiva, pero según contó su padre a ElDía, cuando llegó «su pronóstico era favorable, cuando lo vio el medico en la Guardia dijo que no era necesario y fue directamente a sala común».
Afortunadamente el estado del niño es muy alentador, pero igualmente se decidió mantenerlo en observación por 48 horas. «Esta estable, está mejor, incluso hoy comenzó a hidratarse, estaba sin alimentación, tomó leche a la mañana y a la tarde, comió manzana al mediodía y eso lo ayudó a recobrar el ánimo», indicó su papá.
«No está en terapia. En estos momentos está con suero y le están dando una pequeña dosis de oxígeno para ayudarlo, pero tiene una buena oxigenación cerebral que eso es lo más importante», manifestó Daniel; y agregó que «hoy le hicieron placas, laboratorio, pero evoluciona bien, le controlan la fiebre. Duerme por momentos y por otros está molesto, llora, pero estamos esperanzados que posiblemente mañana o el lunes nos den el alta».
Daniel Schneider quiso destacar «el trabajo maravilloso de los policías». «Fue un trabajo espectacular, como papá me saco el sombrero por lo que hicieron y en el Hospital también, quiero felicitar a todo el personal, el pediatra, su equipo de trabajo, muy buen trabajo el de todos», acotó.