La mañana del 17 de abril, en el habitual reporte diario del Ministerio de Salud sobre la evolución de la pandemia de coronavirus, se habló de un tema que hasta entonces no: el sexo virtual como modo de evitar el contacto físico en las parejas y así evitar el contagio del virus Covid-19.
«El distanciamiento social es la medida más efectiva de prevención del coronavirus. Entonces, cuando hablamos de distanciamiento es importante evitar el contacto cara a cara y eso incluye encuentros sexuales con personas con las que no convivimos «, dijo entonces el médico infectólogo José Barletta.
El especialista recomendó el uso de alternativas digitales. «Pueden ser buenas alternativas, las herramientas como las videollamadas, el sexo virtual o el sexting «, señaló. Sobre las formas de contagio del Covid-19, el funcionario admitió que hay poco conocimiento científico sobre si se puede transmitir durante el acto sexual. «Sabemos que el coronavirus se transmite con la gotas que expulsamos cuando hablamos, tosemos o estornudamos pero hay poca información disponible de si el virus se elimina a través del semen o las secreciones de la vagina y el recto. Sí, se puede transmitir con los besos y es bastante probable que pueda trasmitirse por vía del sexo anal u oral», aseguró Barletta y, a su vez, recomendó el uso del preservativo.
El especialista también recomendó evitar mantener relaciones sexuales con personas que tengan síntomas incluso si son parejas estables.
En Nogoyá, una pareja de jóvenes no ha atendido esas recomendaciones de practicar el sexo virtual, y ha priorizado el contacto cuerpo a cuerpo. Y sus encuentros, al parecer, tienen la enjundia de pocos y han despertado el interés, primero, y la incomodidad, después, de una vecina que ha venido sintiéndose incómoda con la rutina sexual de la pareja y, sobre todo, por los ruidos que provocan.
Eso denunció.
Este domingo 3 de mayo se presentó ante las autoridades policiales para denunciar a su vecina, una funcionaria policial.
Que “hace dos semanas que estoy teniendo problemas con esta chica y su pareja dado que a todas horas tienen relaciones sexuales, a raíz de las cuales se escuchan muchos ruidos molestos como por ejemplo un mueble que golpea contra la pared, gemidos y gritos los cuales son en un volumen muy elevado lo cual nos molesta y perturba tanto a mi como a mi hijo”, planteó ante los efectivos que recibieron su denuncia.
La mujer, 45 años, madre de un muchacho de 23, relató de qué modo la actividad sexual la perturba a ella y a su hijo.
La piedra de toque que la movió a acercarse hasta la Policía para denunciar a su vecina fue lo que ocurrió en la tarde de este domingo 3. “En un momento no aguanté más y comencé a gritarle desde el patio que se calmaran, a lo que salieron al patio y comenzaron a hacer ruidos a modo de burla seguido de insultos por parte de la chica, la cual también me decía. ´Te voy a hacer una denuncia´, y que era una envidiosa, que quién era para meterme con ella”.
Eso dijo ante los funcionarios policiales, dos de los cuales salieron como testigo en su denuncia contra la vecina. “Hago la presente con el fin de dejar constancia de lo que ocurrió como así también que se tome alguna medida para que esto no vuelva a ocurrir, dado que tengo miedo que esto pase a mayores”, cerró su exposición.
El caso llegó a los Tribunales de Nogoyá. ¿Irán los funcionarios con un decibelímetro a constatar qué tan ruidosa resulta la pareja en sus momentos de intimidad sexual?
Crédito: Entre Ríos Ahora
