Se desarrolló audiencia en el Juzgado de Garantías de Concepción del Uruguay, ante la jueza Melisa Ríos, para tratar la situación procesal de Juan Antonio Galarza, hasta ahora el único detenido en el marco de la causa que se sigue por el millonario asalto a mano armada en perjuicio de la Distribuidora Di Zeo, ocurrido el 11 del corriente mes.
Estuvieron presentes la fiscal interviniente, doctora María Occhi y el defensor particular del acusado, doctor José Peluffo.
En su alegato la fiscal sostuvo que hay suficientes elementos para sostener en esta etapa de la investigación, la posibilidad de autoría del hecho por parte de Galarza, contándose con videos donde, si bien no se ven los rostros, se lo puede ver caminar con cierta dificultad y esto a raíz de un accidente que tuviera hace poco tiempo. También señaló que hay elementos secuestrados que están siendo sometidos a peritajes, cuyos resultados se esperan en los próximos días y la posibilidad de declaraciones de testigos, por lo que consideró que hay riesgos procesales y solicitó la prisión preventiva por 45 días.
El doctor Peluffo se opuso rotundamente a esta medida, asegurando que se tiene presa a una persona por sus antecedentes y no por las pruebas, al tiempo que sostuvo que esto es así para calmar a una comunidad inquieta por la serie de hechos ocurridos en los últimos días.
También afirmó que su cliente de casi 60 años, jamás podría moverse y accionar como lo hicieron los asaltantes de la firma Di Zeo y que se observa en uno de los videos, demostrando una agilidad evidente de personas jóvenes y agregó “Usted señoría puede verlo personalmente a Galarza con su físico que evidentemente está lejos de poder saltar y moverse como lo hicieron los autores del hecho”.
Galarza hizo uso de la palabra y aseguró que no tenía nada que ver con el hecho y que sabía que lo estaban buscando y no se fue.
Tras un cuarto intermedio la doctora Melisa Ríos hizo un minucioso análisis de los hechos y discrepó con el doctor Peluffo en cuanto a las características del sospechoso y el detenido y sobre la posibilidad de que Galarza no haya sido quien se movilizaba como acompañante.
Esto sumado a otros elementos, los antecedentes penales (tiene condenas cumplidas y una a punto de finalizar) y sus cambios de domicilio, justificarían el temor de la Fiscalía por la falta de arraigo y entorpecimiento, considerando también que faltan encontrar otras dos personas, no se recuperó el dinero, ni el arma, razón por la cual dispuso la prisión preventiva por 25 días y su alojamiento en Comisaría Primera.
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