La mujer de 30 años, docente integral, habría alcanzado a enviar un mensaje pidiendo ayuda tras ser baleada por su pareja policía. El hecho ocurrió en Gualeguaychú y está bajo investigación judicial.
Mariano Leonel Corvalán, un integrante de la Policía de Entre Ríos, de 38 años, le disparó a su pareja Carolina Ivana Huck, de 30 años en la vivienda que compartían junto a una hija de 5 años en la ciudad de Gualeguaychú.
Llamó a la ambulancia y pidió ayuda. Minutos más tarde, cuando la unidad sanitaria trasladó a la mujer y llegó un móvil policial, Corvalán se efectuó un disparo.
El estado de salud de ambos es crítico y están internados en el hospital Centenario. Huck fue intervenida quirúrgicamente: le extirparon el bazo y le suturaron el diafragma. Permanece en terapia intensiva con drenajes en ambos pulmones por hemoneumotórax bilateral, acumulación de sangre y aire en ambos pulmones.
En el caso de Corvalán, “su estado es reservado. Permanece internado (en calidad de detenido) también en terapia intensiva, con una lesión cerebral importante”.
La mujer de 30 años es docente integral y secretaria de un establecimiento de educación especial. La niña de 5 años presenció el momento del disparo y luego fue llevada por un familiar, a solicitud de su padre, quien luego intentó quitarse la vida, con un tiro ascendente en la parte baja de la mandíbula.
“Me pegó un tiro”
Según indica La Nación, la mujer alcanzó a enviar un mensaje de audio a una amiga para contar lo que estaba ocurriendo: “Leonel me pegó un tiro, por favor pedí ayuda”. En el fondo del audio se escucharía el llanto de la hija.
El mensaje habría sido grabado a las 21.28 del domingo. Carolina había pasado buena parte de la tarde con la amiga a la que le envió el audio, y le habría comentado que, en los últimos tiempos, Corvalán “estaba muy celoso y eso llevaba a discusiones”.
“El disparo que propinó Corvalán a su pareja fue dentro del domicilio, mientras que el intento de quitarse la vida ocurrió en la vereda, de donde ya recogimos un casquillo que se corresponde con el arma reglamentaria del policía”, dijo el fiscal Jorge Gutiérrez, a cargo de la investigación.
“Más allá del estado delicado de Corvalán, ordené su aprehensión y se encuentra bajo custodia policial. También solicité la intervención de Gendarmería para que realice las pericias y estamos recabando testimonios”, agregó.
“Según tengo entendido, la niña presenció todo lo ocurrido. Actualmente, se encuentra con un familiar de su madre”, señaló. Se dio intervención al Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf) y al Ministerio Pupilar. No se descarta que con el avance de la investigación se solicite su testimonio en Cámara Gesell.
Gutiérrez mencionó además que “testigos presenciales del hecho no hay. No tenemos la versión de cómo empezó esto. Hay dos teléfonos secuestrados: uno destrozado, encontrado afuera de la casa, que la hermana del policía destrozó de bronca; y otro que se secuestró adentro de la casa”.
Finalmente, dio cuenta que se va a apartar a la Policía de la investigación y Corvalán tendrá la custodia de un gendarme. También las pericias se harán con esa fuerza.
La Nación – Entre Ríos Ahora