Bases Federadas expresó su “enérgico rechazo al desmantelamiento del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA)». Denunció también que el gobierno nacional avanza sobre la soberanía científica y tecnológica, desprotege los territorios extensos del país y deja sin cobertura esencial a los pequeños productores y agricultores familiares.
“Por estas horas, el gobierno nacional ejecuta un plan de reducción de personal, a la vez que revisa la venta de inmuebles del Inta, tanto sean edificios como campos de investigación y extensión”, alertó el nucleamiento gremial de pequeños y medianos productores, que señaló que “sin estos recursos estratégicos, su trabajo no puede realizarse”.
También advirtió sobre la drástica reducción de los fondos para todo el sistema de ciencia y tecnología, abarcando al Inta, el Inta, el Conicet, el Senasa, las universidades y todos los organismos que hacen que la Argentina pueda tener “desarrollo rural, producción, arraigo, gestión del territorio y alimentos”.
“Al igual que en la década de los 90, este gobierno pretende dejar de tener soberanía en sus investigaciones y en su extensión, anulando el organismo que es referente nacional e internacional en desarrollo agronómico”, denunció Bases Federadas a través de un comunicado en el que instó a “todas las entidades del sector agropecuario, integrantes del consejo directivo del Inta, a no avalar ninguna decisión que afecte al instituto, ni desde los recursos humanos ni desde sus presupuestos ni de los bienes necesarios para su normal desenvolvimiento”.
El Ministerio de Economía viene presionando desde principios de año para despedir a unas 1.500 personas del Inta, sobre una plantilla de 6.424 profesionales, técnicos y administrativos, a la vez que achicar el organismo y vender activos. Esta exigencia motivó la renuncia, hace algunas semanas, de Juan Cruz Molina Hafford a la presidencia del Inta. Su reemplazante, Nicolás Bronzovich, propone reducir más de mil empleos y vender tierras y edificios del organismo.
Agroclave