Ocurrió este lunes, alrededor de las 15.30, frente a una vivienda ubicada sobre calle cortada Los Pinos al 1900 -en la zona del Barrio Virgen Niña-, donde tres mujeres fueron violentadas mientras un auto ardía en llamas.
Por problemas de pareja, una joven de 20 años decidió finalizar la relación que mantenía con un muchacho de 30 desde hacía aproximadamente dos años, quienes convivían en el hogar familiar de ella hacía uno y medio. Para efectivizar esa ruptura, le había negado que volviera a ingresar a la casa, por lo que tenía preparadas todas sus pertenencias a fin de que se fuera de allí definitivamente.
Horas más tarde, regresó en busca del automóvil (marca Renault, modelo 4L, dominio XEX 941, color celeste) que habían comprado entre ambos, con un bidón de nafta destinada a recargarle el tanque. Aparentemente, su intención era trasladarse a Colón para llevarle algunos efectos personales a su hermano menor, detenido desde el fin de semana tras asaltar una panadería y lesionar a la cajera del comercio.
Sin embargo, una discusión entre ambos por la llave del vehículo motivó la intervención de la madre y de una hermana de la chica -de 54 y 32 años de edad, respectivamente-, quienes comparten el mismo domicilio pero residen en viviendas separadas. En el fragor de la pelea, el agresor roció el rodado que compartía junto a su entonces pareja con el combustible que tenía encima y lo prendió fuego, propagándose las llamas rápidamente.
Esa violenta escena se completó cuando la joven fue rociada con nafta y el muchacho sostenía entre sus manos un encendedor accionado, por lo que la madre y la hermana mayor de la víctima volvieron a intervenir para evitar que la quemara viva, forcejeo mediante, logrando liberarla y que corriera junto a su hermana hacia el interior de la casa.
Ante el pedido de auxilio a los vecinos de la cuadra, la magnitud del fuego en el auto y la desesperación de su exsuegra, el agresor optó por retirarse en la moto en que había arribado, casi simultáneamente a los dramáticos llamados a la comisaría elisense y al cuartel de bomberos voluntarios para que tomaran intervención en el lugar.
«Me mandé una cagada» atinó a decir, en evidente estado de nerviosismo, cuando minutos más tarde se presentó voluntariamente en la dependencia policial local y fue aprehendido. Posteriormente, fue trasladado desde la ciudad jardín hacia la Jefatura Departamental de Policía Colón -ya en calidad de detenido, por disposición judicial-, donde quedó alojado por “Supuesto delito de tentativa de femicidio”.
Además del personal policial y los bomberos, intervino Sección Criminalística y el fiscal de turno, Alejandro Perroud, secuestrando en el lugar del hecho algunos elementos de interés para la causa. En tanto, las tres mujeres fueron trasladadas al Hospital San Roque para su atención, donde puntualmente se le realizaron curaciones a la menor de ellas, quien resultó lesionada por el ingreso de combustible en uno de sus ojos.
El Entre Ríos
