El fiscal pidió la pena ante el cúmulo de pruebas y contundentes declaraciones de testigos.
Culminó este miércoles por la mañana el debate oral y público contra Alejandro Schmidt, vecino de la ciudad de Villaguay acusado de coautoría del delito de Tentativa de Robo Agravado, en compañía de Misael Gallay, alias “Michel”, quien falleció en el lugar de los hechos, una finca de Colonia 3 de Febrero, propiedad de Roberto Víctor Charrier. El fiscal Fernando Martínez Uncal pidió para Schmidt 9 años de prisión en tanto que su defensor particular, Arturo Martínez Piñón ,solicitó su absolución por el beneficio de la duda.
Como se recordará, en el debate oral y público, se ventilaron los hechos ocurridos el 22 de enero de 2017, en el que resultara muerto en el patio de una finca del departamento Uruguay el mentado Gallay, entonces de 29 años de edad.
En el debate, la víctima, Roberto Víctor Bonín, un modesto ganadero, cuya finca está ubicada en Colonia 3 de Febrero, en la zona de Primero de Mayo, relató los hechos de los que fue víctima. El hombre fue despertado bruscamente de su descanso por una luz de linterna en su ventana, por lo cual preguntó quién era y al responderle una voz “la policía”, sin tomar precauciones se levantó, prendió la luz del interior de su casa pues afuera no tiene, se vistió y salió. En la oscuridad detrás del alambrado que resguarda su sencilla vivienda, una voz lo interrogaba acerca de si le falta hacienda o si había vendido hacienda.
El hombre negó ambas cosas y en eso apareció otro sujeto que le dijo que eso era un asalto. Mientras el ganadero huía hacia el interior de la casa, sonó el primer disparo que dio en el marco de la puerta a centímetros de su persona. Tomó su escopeta, se asomó y disparó hacia donde venían los disparos de los intrusos.
Vació el cargador, se encerró y volvió a cargar, cuando se asomó de nuevo, vio un auto que se iba por el camino de ripio, hacia Villa Elisa.
Al otro día su hermano encontró a Misael “Michel” Gallay muerto en el camino de entrada con un arma en la mano y una linterna- picana en sus piernas.
Aparecieron también las chinelas que tenían el ADN de Schmidt, quien pese a todo negó haber estado en el lugar, aunque admitió que ese día había estado en la casa de Gallay y que habían ido al balneario. Dijo que sin embargo, el pernoctó en la casa de otro amigo y que al otro día se fue a Villaguay en un remís. Esto fue real: se fue de la terminal de Villa Elisa a Villaguay en remís, pero la fiscalía consideró que sí estuvo en la casa de la víctima citando una testigo que dijo que quiso ir con ellos adonde iban y le respondieron que nó porque” era peligroso” y lo fue en grado extremo para Gallay quien murió en la tentativa de robo. El Tribunal presidido por el juez Mariano Martínez e integrado por los jueces Fabián López Moras y Rubén Chaia, pasó ayer a deliberar y decidirá en estos días, cuál será su veredicto. (La calle)
