La tomó de las muñecas y la amenazaba con quebrárselas porque «no servía como mujer». Llegó a dispararle con un aire comprimido. Tras la denuncia por los tormentos que sufrió la víctima, acordó seis meses de prisión condicional.
Todo sucedió el pasado 10 de febrero en una estancia situada en el camino Rojas, a poco de la Ruta 16. Luis Alberto Matevé inició una discusión con su pareja a causa de que la joven no podía mantener relaciones sexuales debido a una orden médica. Esto enfureció al condenado, que la tomó de las muñecas y la amenazaba con quebrárselas porque «no servía como mujer» y que era «una pu. . . «.
Matevé empujó a la joven y le dio un golpe de puño en el abdomen. Tras dejarla tirada,la víctima escapó, salió de la vivienda familiar y se refugió a pocos metros, donde hay unos galpones. Desde allí esperaba ser auxiliada por su madre.
Pero hasta ese lugar la siguió el agresor, que se armó de un rifle aire comprimido para atemorizarla. Comenzó a disparar al techo del galpón, mientras seguía con la discusión, hasta que al cabo de unos minutos se abalanzó sobre mujer y le apoyó el arma en el abdomen. La amenazaba continuamente y ejecutó un disparo, pero afortunadamente la víctima no salió herida de esa agresión.
Luego de ello, la mujer juntó a sus hijos y una prima de su pareja, que fue testigo de todo lo ocurrido, abandonó el lugar, mientras Matevé le gritaba: «ya te voy a buscar, me llevaste lo que más quería». Inmediatamente se realizó la denuncia y el médico de la policía constató un hematoma en la muñeca izquierda y otro en la derecha, que en cierta forma sirvieron como evidencia para sostener el relato de la denunciante.
El joven recibió una pena de prisión condicional de sólo 6 meses, que se acordó en un juicio abreviado entre su defensor Pablo Di Lollo y la fiscal Natalia Bartolo, favorecido por la falta de antecedentes. Pero Matevé deberá cumplir por el término de dos años una serie de medidas de coerción que si llegara a violar convertirán la condicional en una pena efectiva. (El Día)