Martina, de cuatro años, nació con un dedo de más en su mano derecha. Fue intervenida con éxito en el hospital materno infantil San Roque. «Lo más importante es que ella está feliz», aseguró el médico.
Martina, una niña entrerriana de cuatro años, fue sometida recientemente a una cirugía de polidactilia en el hospital San Roque de Paraná. La menor había nacido con un dedo adicional en su mano derecha, una condición genética poco frecuente.
El procedimiento fue realizado por el traumatólogo y ortopedista Guillermo Lódolo, quien explicó a Elonce que “se trata de una deformidad congénita, y en este caso particular, el dedo adicional no era funcional, por lo que se decidió su amputación”.
“El dedito tenía uña, sensibilidad, circulación e incluso hueso, pero no tenía movilidad. Era como un ganchito, un dedo normal para ella, pero sin función. Al jugar, empezaba a engancharlo sin querer, lo que le generaba traumatismos frecuentes”, relató el profesional en diálogo con Nunca Es Tarde.
Una decisión consensuada
El médico detalló que la decisión fue tomada en conjunto con Martina y su mamá, quien acompañó el proceso quirúrgico desde el primer momento. “La nena lo tenía completamente integrado, pero ya empezaba a esconderlo; ella misma quería sacárselo. Y lo más importante es que ahora está feliz”, destacó.
El procedimiento quirúrgico se realizó hace un mes y la recuperación evoluciona de manera positiva. A 20 días del posoperatorio, Martina ya no presentaba complicaciones. “No fue una cirugía traumática. Se trató de una amputación controlada, bajo todos los estudios previos necesarios para asegurar que la paciente estaba en condiciones”, subrayó Lódolo.
El caso fue atendido en el hospital materno infantil San Roque, referencia en la provincia para cirugías pediátricas de mediana y alta complejidad.
Elonce
