El artículo 4° de ese decreto “ratificó” la vigencia de la circular N° 30 dictada por Busti.
A esa disposición, le siguió el dictado de la resolución Nº 2.565, emitida por el Consejo de Educación en 2008, que creó el manual de funciones de los rectores y directivos de escuela, y les impuso como obligación, entre sus funciones, la de informar sobre ausencias por adhesión a las huelgas de parte de los docentes.
Luego, el 4 de agosto de 2016, aquella normativa se amplió con la publicación de la resolución Nº 2.566, también del CGE, que amplió el trabajo del personal directivo de las escuelas e incorporó un apartado en el que se incluyó entre “las funciones y responsabilidades del personal directivo”, la tarea de “realizar el control y carga de las asistencias del personal del establecimiento mediante el Sistema de Administración de Gestión Educativa (Sage)”.
En esas normativas se apoyo ahora el Consejo General de Educación (CGE) para abrirles sumarios administrativos a dos supervisores de nivel primario del departamento Victoria por el “incumplimiento de intimar a los directivos de las cargas de asistencia en diferentes escuelas”. La investigación alcanza a los supervisores Flavia Affranchino y Pedro Miguel Gutiérrez, exsecretario general de la seccional Victoria de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer).
A través de la resolución Nº 555, dictada el viernes 21 del actual, Educación dispuso la instrucción de un sumario administrativo a ambos supervisores por “incumplimiento de los deberes propios del supervisor”, en particular “la falta de acatamiento a las directivas del superior jerárquico, falta de aplicación de sanciones leves a los subalternos jerárquicamente ante los incumplimientos detectados por parte de los directivos bajo su control en la carga de novedades en SAGE entre los días 25 de septiembre al 25 de octubre del año 2024, como la falta de apertura de la institución educativa a su cargo los días de paro decretados en septiembre y octubre de 2024, no existiendo aplicación de sanción leve o inicio de actuación sumaria alguna contra dichos directivos”.
“Nos inician sumario por no haber presionado, apretado, como quieran denominarlo, a los equipos directivos de las escuelas para que carguen o informen quién se adhirió a una medida de fuerza. En una actitud persecutoria, quieren que nosotros apliquemos, como docentes que somos, a otros docentes una medida persecutoria. Son compañeros de trabajo y nosotros no estamos para estar persiguiéndolo o apretándolos para responder a una directiva del Consejo de Educación”, explicó al programa Puro Cuento de Radio Plaza 94.7.
Gutiérrez expresó que se intenta coartar el “derecho constitucional de todo trabajador a realizar una huelga y también el derecho que tenemos nosotros, los supervisores, a ejercer ese derecho también. Y más todavía, cuando hoy por hoy, sabemos todos las dificultad que tiene cada uno de los trabajadores para llegar a fin de mes y nos ponen en el rol de tener que meterle la mano en el bolsillo o de castigarlos a los docentes. No podemos estar en ese rol y función porque estamos para otras cosas. Los supervisores estamos para otro trabajo”.
-Estás en el máximo cargo de la carrera docente, supervisor: ¿alguna vez te habían iniciado sumario?
-En marzo cumplo 31 años en la docencia. Nunca en estos 31 años me han iniciado un sumario. Este es el primero y por no cumplir con un rol que nosotros no aceptamos. Creemos que no es para lo que estamos. Nuestra función es acompañar a las escuelas, es acompañar a los estudiantes, acompañar a las familias, para poder lograr mejoras desde lo educativo. En eso nos enfocamos y no en lo otro que nos pretenden colocar por parte de las autoridades educativas, en un rol de contralor que no nos corresponde. Nosotros entendemos que para eso hay funcionarios políticos, que sean ellos los encargados de llevar adelante ese contralor, y no nosotros, que somos trabajadores como el resto de la docencia.
Entre Ríos Ahora
