Los convenios prevén un trabajo articulado entre el organismo nacional y los gobiernos provinciales que, en una primera etapa, consistirá en el relevamiento de todos los frigoríficos con habilitación provincial, sobre los que se realizará un diagnóstico de sus condiciones higiénico-sanitarias.
El plan de acciones contempla además la capacitación en criterios, metodologías de trabajo y fiscalización destinados a supervisores, directores técnicos, jefes del Servicio de Inspección Veterinaria, encargados de calidad y demás personal de la totalidad de las plantas locales. También se instrumentarán jornadas periódicas de capacitación en inocuidad alimentaria, salud pública, Enfermedades Transmisibles por los Alimentos (ETAs) a titulares, gerentes y responsables de las plantas.
Los acuerdos fueron firmados en distintos encuentros por el presidente y vicepresidente del Senasa, Pablo Cortese y Néstor Osacar, respectivamente; el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio; y los ministros de la Producción y el Desarrollo Económico Sostenible de Chaco, Víctor Zimmermann; y de Salud de Santa Fe, Silvina Ciancio; y el responsable de la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria, Eduardo Elizalde.
De este modo, las tres provincias se suman a Tucumán, Salta, Corrientes, La Rioja, Catamarca y San Luis, que ya están trabajando con el Senasa para establecer un estándar sanitario unificado.