A la joven de Gualeguaychú condenada por el asesinato de Fernando Pastorizzo se la vio en los pasillos del centro de salud público. Estaba esposada y rodeada de policías.
Esposada por delante y rodeada de varios efectivos de la Policía de Entre Ríos, así se la vio a Nahir Galarza, condenada por haber matado a su novio, Fernando Pastorizzo, de dos disparos, en los pasillos del Hospital San Martín, de Paraná.
La joven de Gualeguaychú fue trasladada los casi dos kilómetros que separan la Unidad Penal Nº 6 de Mujeres de Paraná al Hospital San Martín por personal policial y penitenciario, y ambas fuerzas de seguridad realizaron la custodia y protección de la detenida.
Según informó un cronista de Radio La Voz, Nahir fue para realizarse estudios de rutina, sobre todo con lo que respecta al tratamiento de tensión neuronal que se somete inclusive desde antes de cometer el crimen.
No es la primera vez que se la ve a Galarza en los pasillos del Hospital San Martín debido a que es el lugar al cual va cada vez que necesita tratamiento médico o controles de rutina.
