La pequeña, de 3 años, continúa en lista de espera. Su papá contó que si bien está estable, «ella necesita con urgencia un corazoncito para poder tener expectativas de seguir con vida».
Mara Hollmann tiene 3 años y es oriunda de Paraná. Desde fines de 2019 espera un trasplante de corazón y permanece en lista de emergencia nacional del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai).
Su papá, Gerardo, indicó que «Mara está estable, está compensada. A pesar de la noticia que tenemos y el camino que estamos transcurriendo, ella en este momento goza de buena salud».
«Nos tuvimos que radicar en Buenos Aires porque una de las condiciones para ingresar a lista de espera es vivir cerca de la institución donde se va a realizar el procedimiento. Estamos a 10 cuadras del Hospital Italiano de Almagro», dijo.
Comentó que «ella presenta una insuficiencia cardíaca severa. Si bien pasó por tres cirugías no se pudo rehabilitar ese corazón. Ella necesita con urgencia un corazoncito para poder tener expectativas de seguir con vida. Hoy es algo raro o alentador que esté bien, que esté compensada, pero así también en cualquier momento puede dejar de funcionar su medio interno. Cuando empieza a manifestar síntomas silenciosos, sus órganos vitales dejan de funcionar. Por eso hay que estar cerca y con cuidados muy precisos sobre ella para tratar de detectarlo antes de que se produzca un complicado caso en alguno de sus órganos».
«Al cuarto mes de embarazo se le hizo un estudio a su mamá, Ana, y se detectaba un probable diagnóstico de cardiopatía congénita. Cuando nos derivaron a Buenos Aires confirmaron ese diagnóstico. Nació allá, la operaron a los nueve días, a los 10 meses y antes de los tres años», relató.
Señaló que «ella es una nena normal, hace todo lo que hace cualquier niño, juega, es bastante traviesa, anda para todos lados. Se hace distinto el cuidado hacia ella: la comida en cantidad y calidad, toma cuatro remedios más dos vitaminas dos veces al día. Hay que controlarle la presión, ver si evacúa».
«Los órganos no van al cielo, la idea es generar herramientas, precedentes porque queremos que lo de Mara salga adelante pero otros niños también. Es lamentable ver cuando entran en un proceso de deterioro», agregó. (Elonce)