La Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos (Capper) manifiesta su preocupación por el fallo del Superior Tribunal de Justicia (STJ) que confirma la prohibición de aplicar fitosanitarios en un radio de 1.000 metros terrestres y de 3.000 metros aéreos alrededor de todas las escuelas rurales. La medida afectará al sector ya que parte de la producción de granos de la provincia es el alimento de los cerdos.
El fallo judicial, tras el amparo ambiental presentado por la Asociación del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) y el Foro Ecologista de Paraná, dejará improductivas un total de 282.000 hectáreas. Esto impactará directamente en la cadena porcina, ya que la caída de la producción de granos obligará a importar de otras provincias, además de que dejará sin alternativa a muchos productores agropecuarios.
Capper apuesta por una producción sustentable, que se comprometa con el cuidado del medio ambiente y la salud humana mediante el uso de buenas prácticas agrícolas que incluyen la utilización de productos fitosanitarios de manera responsable. En este sentido, resulta necesario que el Estado también ejerza el poder de contralor que la legislación le otorga para penalizar a quienes incumplen con las normativas.
Sin desconocer los motivos que originaron el fallo del máximo órgano judicial de Entre Ríos, la entidad considera que es posible impulsar un modelo de producción sostenible, que establezca parámetros definidos sobre el cuidado del ambiente y la vida, pero que también estimule a las cadenas productivas que generan valor y son fuente de trabajo genuino en la provincia.
Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos