Un especialista evaluó que «de mantenerse esta combinación de factores positivos, se alcanzaría gradualmente un estado climático favorable para la producción agropecuaria durante la campaña 2018- 2019, próxima a comenzar».
El escenario climático tendió a normalizarse, lo que permite albergar optimismo sobre la campaña agrícola 2018-2019, próxima a comenzar, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
En el Informe Perspectivas Agroclimáticas Estacional de la entidad, a cargo del especialista Eduardo Sierra, se destacó que «durante el final del verano y lo que va del otoño, el escenario climático tendió a normalizarse».
«Debe tenerse en cuenta que la tendencia expuesta no es todavía firme y podría sufrir ajustes positivos o negativos, que será necesario monitorear durante cierto tiempo, antes de darla por cierta», dijo Sierra.
También destacó que «no puede descartarse el posible inicio de una fase climática negativa que podría extenderse durante varios años, como ya ha sucedido en el pasado».
«Posible, pero mucho menos probable, sería el desarrollo de un episodio de El Niño que aportaría precipitaciones abundantes al área agrícola», señaló. .
La situación actual deriva de que el enfriamiento del Océano Pacífico ecuatorial disminuyó considerablemente, asumiendo un estado neutral moderadamente frío.
«Paralelamente, el Océano Atlántico Sur se calentó debido al avance hacia el sur de la corriente marina cálida del Brasil, mientras la corriente marina fría de Malvinas retrocedió hasta casi desaparecer», añadió.
Evaluó que «de mantenerse esta combinación de factores positivos, se alcanzaría gradualmente un estado climático favorable para la producción agropecuaria durante la campaña 2018- 2019, próxima a comenzar», con la siembra de los granos finos, entre ellos el trigo.
«No obstante, esta evolución podría ser lenta e irregular, por lo que la recuperación de las zonas afectadas por la sequía desarrollada durante la temporada 2017-2018 podría demorarse», indicó.
Para el analista, el escenario climático invernal, a su vez, «continuará evolucionando hacia su promedio, pero no obstante experimentará perturbaciones de moderada intensidad».
Por su parte, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) a través de sus especialistas en meteorología estimó buenas perspectivas climáticas productivas para la zona núcleo, mientras que los modelos pronostican una condición neutral durante el otoño y el invierno.
En tanto, las precipitaciones registradas durante los primeros 10 días de abril permitirán revertir el estado de suelos y cultivos en una amplia zona del país.