Por el momento, «no hay medidas concretas allanamiento ni detenciones», se informó a Elonce TV. Desde el Justicia mantienen estricta reserva sobre las pistas para «no poner en aviso a captores».
El empresario de Gualeguay, Omar Benvenuto, fue visto por última vez el pasado 27 de octubre pasado. A partir de entonces se realizaron rastrillajes, allanamientos e incluso viajaron investigadores a Paraguay.
La causa finalmente quedó bajo la competencia de la Justicia Federal, por lo que pasó de caratularse como «desaparición ilegitima de la libertad» a investigarse un «secuestro extorsivo».
Al respecto, el abogado de su familia, Esteban Español, confirmó a Elonce TV que «se analizando llamadas», al tiempo que adelantó a este medio que «hay varias pistas» que se están siguiendo. Interrogado acerca de las mismas, manifestó que no se darán a conocer «para no entorpecer» la investigación.
Tras insistir con que prefieren mantener en reserva todos los datos que van surgiendo respecto del paradero del hombre desaparecido «para no poner en aviso a captores». No obstante, señaló a este medio que, por el momento, «no hay medidas concretas allanamiento ni detenciones».
Los captores se comunicaron con la familia los primeros días de noviembre y no sólo pidieron «una suma millonaria» sino hicieron referencia a vehículos y movimientos propios de la víctima, lo que hace suponer tenían un conocimiento concreto de Benvenuto y su empresa. La negociación nunca avanzó porque no hubo un una prueba de vida.
El caso
Cabe recordar que el 27 de octubre de 2017, el empresario Omar Benvenuto, de 66 años, salió a las 20 horas desde la casa de su madre en dirección al norte, a bordo de su camioneta Toyota, y nunca se supo más nada de él, solo la Toyota fue encontrada abandonada sobre la banquina a unos kilómetros de la ciudad, sin signos de violencia y con su Nextel dentro, en el kilómentro 242 de la ruta 12. Un perro rastreador detectó que el empresario cruzó a pie hacia el otro lado de la ruta y es allí donde se pierde el rastro y comienza el misterio. Ese indicio sugiere que hubo un encuentro con otro vehículo en ese punto, pero al momento es solo una conjetura. Lo cierto es que desde ese instante no atendió más su celular.
Hubo intensos rastrillajes por tierra y aire, pero no aparecieron pistas. Los entrecruzamientos de llamadas para investigar al entorno de Benvenuto generaron, en un principio, un revuelo en el sector político, pero esas líneas de investigación no lograron resultados.
Español reveló que «los investigadores están convencidos que no se trata de un secuestro exprés típico de estos tiempos, con cobros de poco dinero e inmediatos, sino que estamos frente a una modalidad que incluye largos tiempos de cautiverio, tratativas que se interrumpen y se retoman y que por lo tanto demanda una organización importante». En ese sentido, el abogado de la familia afirmó que «no se trata de una banda de improvisados». Paradójicamente, este dato podría ser alentador: «Esperamos que no sean improvisados, porque eso nos garantizaría la posibilidad de recuperar con vida a Benvenuto», subrayó. (El Once)