En lo que se considera un fallo histórico, la Justicia entrerriana decidió condenar a un año y medio de prisión en suspenso a los tres imputados por fumigar la Escuela Nº 44 «República Argentina» de Colonia Santa Anita. Además, según se supo, se fijó una inhabilitación por un año para quien hizo efectiva la pulverización aérea. Los tres condenados son el presidente de la empresa fumigadora Villaguay Aero Litoral SA, Erminio Bernardo Rodríguez; el dueño del campo de arroz y maíz que contrató dicho servicio, José Mario Honecker; y el piloto que manejaba el avión fumigador, César Martín Visconti. La condena se basó en «lesiones leves culposas y contaminación ambiental culposa». Cabe recordar que desde la Mesa de Enlace se había respaldado al productor y la empresa fumigadora.
Un fallo del Tribunal Oral de Concepción del Uruguay quedará para la historia como el primer límite judicial a la fumigación con tóxicos en zonas rurales. Se condenó a los tres imputados por fumigar a la comunidad educativa de la Escuela Nº 44 República Argentina de Colonia Santa Anita.
La condena fue de un año y medio de prisión en suspenso para Rodríguez, Honecker y Visconti, por el delito de “lesiones leves culposas y contaminación ambiental culposa”, tras realizar pulverizaciones aéreas en los alrededores de la escuela en horario de clase. La condena incluye la inhabilitación por un año para quien llevó a cabo la fumigación con agrotóxicos.
El tribunal estuvo compuesto por los jueces Fabián López Mora, Mariano Martínez y Mariela Emilce Rojas y falló en similitud con la solicitud de la fiscalía.
Mariela Leiva era la directora de la escuela al momento de la fumigación. Fue la propia docente la que impulsó la denuncia contra el productor y los responsables directos de la fumigación aérea a la institución educativa rural. Leiva es referente de la campaña «Paren de Fumigar las Escuelas».
Honecker fue el productor que contrató los servicios de fumigación para el que se utilizaron químicos que se encuadraron dentro de la Ley de Residuos Peligrosos (Nº 24.051). El fallo contra el uso de agrotóxicos es la primera sentencia que limita este tipo de prácticas en la Argentina. (Análisis)