Como informáramos ayer en Génesis24, un guardaparques de El Palmar encontró restos óseos humanos, lo que generó la intervención policial con conocimiento del fiscal Alejandro Perroud.
Lo sorprendente del caso fue que con el correr de las horas trascendió que estos restos pertenecerían a Juan Ramón Maciel (22), joven vecino de Ubajay, desaparecido en enero del 2024 y que en noviembre pasado, otro guardaparques fuera quien encontró los huesos, una mochila y una campera del joven en la misma zona de este segundo hallazgo.
Fuentes señalaron que en esta oportunidad, el guardaparques advirtió que había un hueso de considerable tamaño, que resultó ser el fémur y una soga blanca pendiendo del árbol a casi 6 metros de altura, con una vértebra, piezas óseas y soga que en noviembre no fueron advertidas por quienes hicieron las diligencias en el lugar.
Según se supo, estas partes del esqueleto eran las que faltaron al reconocer los restos, por lo que se había pensado que pudieron haber sido llevada por animales, pero en realidad noi fueron vistas oportunamente.
LAS PERICIAS EN NOVIEMBRE
De acuerdo a los estudios de los restos encontrado en noviembre, la muerte se produjo al menos seis meses antes del hallazgo. Un análisis detallado y microscópico reveló una fractura cercana a la base del cráneo, que sería compatible con una caída de altura, por lo que se presume que pudo haber subido a uno de los árboles. Con este hallazgo de la soga casi 6 meses más tarde, se podría decir que el joven vecino de Ubajay se quitó la vida ahorcándose.
Respecto a la situación legal, se supo que el fiscal Perroud se reuniría con los familiares de Maciel en horas de la mañana de este jueves, para informar sobre este sorpresivo descubrimiento.
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