El gobierno espera el pico de infectados con coronavirus para fines de abril o principios de mayo. El ministro de Salud señaló que una proyección matemática indica que podrían ser 250.000 los casos registrados este año.
El ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, dijo hoy que espera el pico de infectados de coronavirus para fines de abril o principios de mayo y señaló que una proyección matemática indica que podrían ser 250.000 los casos registrados este año.
¿Es cierto que el escenario optimista son 250.000 infectados?, se le consultó al ministro en una entrevista en radial y el funcionario respondió: «Son modelos de simulación. Es un modelo matemático que venimos haciendo. Hasta ahí aguanta bien el sistema de salud».
González García explicó que muchos de los que tienen el virus ni siquiera se dan cuenta. Y de los que sí se dan cuenta y se les comprueba la enfermedad, el 80% no necesita internación y puede sobrellevar la situación de forma en aislamiento total en su domicilio.
«De los que sí necesitan internación, solo el 5% puede tener una patología grave y de ese porcentaje, solo algunos, muy pocos, tienen consecuencias fatales», dijo el ministro de Salud en declaraciones radiales.
En ese sentido, que el problema surge si aparecen muchos casos todos juntos por lo que lo dramático no es tanto la gravedad de la enfermedad sino la forma en que puede hacer colapsar al sistema de salud, porque además ahí las consecuencias se agudizan.
González García dijo que las sociedades científicas estiman que a mediados de abril en adelante puede darse el pico: «Yo creo que a principios de mayo.
Pero lo que hay que estar bien preparado para cuando venga, cuando más tarde mejor y sobre todo si es más amesetado».
El funcionario insistió con que no hay mejor indicación que el aislamiento social para contener la propagación del virus y reducir al mínimo la cantidad de contagiados, por lo que solicitó a la ciudadanía que cumplan con lo establecido por el Gobierno.
También indicó que están viniendo muchos argentinos de afuera por lo que más allá de los controles del Estado, evitar una epidemia generalizada también depende de la responsabilidad de ellos, que cumplan estrictamente el aislamiento.