El mundo gimnasista y el del fútbol entrerriano se vio sorprendido en la jornada de ayer con la novedad. Mucho más aún el cuerpo técnico que encabeza Norberto Acosta que, a poco de iniciar la pretemporada, recibió la peor de las novedades. Y no es para menos dado que se conoció la noticia de que el delantero Lautaro Cosme Damián Robles dejó el club y jugará la próxima temporada en un club de la B Nacional.
¿Un balde de agua fría?
Sin dudas y más que eso aún. Se contaba con el ex delantero de Depro como pilar en esta temporada para acompañar en el ataque a Facundo Perassi, el centrodelantero que proviene de Libertad de Sunchales y que fuera la última incorporación del Lobo.
Acosta tenía el plantel completo que había ido modelando con los dirigentes, pero ayer todo cambió. El jugador nacido en Villaguay le comunicó a dirigentes del club que no seguiría e incluso pasó por la utilería a retirar sus botines, el dato irrefutable de cada jugador cuando abandona un equipo.
Central Córdoba de Santiago del Estero, el conjunto recién ascendido a la B Nacional es el elegido por Robles, que habría sido tentado con una importante oferta ecnómica -imposible de igualar por el Lobo-, para que emigre de la institución uruguayense, con quien tenía todo acordado para su continuidad, esperándose en los próximos días la firma de contratos ya que hasta precisamente este sábado lo ata uno con el conjunto mens sana.
Incluso se conoció que los propios dirigentes gimnasistas se estaban moviendo en pos de una fuente laboral para la esposa del jugador y también para este mismo hacia futuro, pero esto pasó a segundo plano ante el jugoso ofrecimiento de los santiagueños de Central Córdoba.
Barajar y dar de nuevo
Una pena porque desde Gimnasia se había hecho mucho esfuerzo para su continuidad en la búsqueda de hacerlo sentir cómodo, y es por eso que la decisión del jugador molestó mucho a los dirigentes y extraoficialmente se supo que hubo llamados a Santiago del Estero para manifestar la bronca del caso.
Gimnasia y la zona se quedan sin un jugador de gran valía, que tomó la decisión que creyó más conveniente para su futuro deportivo y el económico de su familia. Ahora solo el paso del tiempo determinará si los caminos de las partes fueron para mejor o no.
En el fútbol nada es predecible y Gimnasia está por encima de cualquier jugador o situación incómoda como ésta, por lo que seguramente encontrará la salida con otro refuerzo o la promoción de algún valor del fútbol local.
En eso ya trabajaban los dirigentes luego de asimilar el golpe que significó la salida del goleador del equipo en la última temporada. (La calle)
