Se intenta determinar si existió la posible comisión del delito de privación ilegítima de la libertad agravada contra las monjas de clausura. Este miércoles se realizó la remisión a juicio de la causa, conoció Elonce TV.
Miguel Ángel Cullen, abogado defensor de la madre priora, Luisa Toledo, mencionó a Elonce TV que este miércoles se realizó la remisión de la causa a juicio.
La madre priora del convento Carmelitas Descalzas de Nogoyá, Luisa Toledo, por estos días, reside en Buenos Aires, ya que está afrontando inconvenientes en su salud, mencionó su defensor.
Es la única imputada en la causa. Luisa Toledo, conocida en la congregación como María Isabel de la Santísima Trinidad, tras ser separada de su cargo fue trasladada y reside en una congregación de Buenos Aires.
Al ser consultado respecto de la causa, el letrado manifestó a Elonce TV que «lo único que se está investigando es la privación de la libertad.
Asimismo resaltó que «todo lo que está enmarcado dentro de la disciplina del convento de las carmelitas, no constituye delito, sino que se trata de una práctica ancestral. Tampoco es el flagelo que se `marcó` en un comienzo, como si fuese una cuestión tortuosa; es una práctica eclesiástica que se realiza desde hace muchísimos años y que está autorizado por el propio Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de la Nación».
«Ejercimos el rol que nos compete al entender que había una nulidad en la redacción de los hechos. No implica volverá foja cero, simplemente que se readecúe la acusación a parámetros que entendemos constitucionales. Entendemos que la forma en que están redactados los hechos no nos permite ejercer el derecho de defensa como corresponde. Asimismo planteamos que consideramos que no existió delito, que no existió ninguna conducta atrapada por el Código Penal», puso relevancia el abogado.
Volvió a insistir con que «no se están investigando flagelos ni torturas. Eso está totalmente descartado, lo único que se investiga es lo que dijeron las que víctimas, es decir que si al momento de ellas pedir la salida de la clausura, existió una actitud por parte de la madre priora, de privarlas de esa posibilidad». (El Once)