Hace dos años lo mordió una Yarará y tuvo que recibir el antídoto. Ahora, se encontró con una letal serpiente Coral en el fondo de su casa y decidió atraparla, contó a Elonce. «Se me pasó entre los pies pero no me atacó», dijo.
Cristian vive en la zona del Hipódromo de Oro Verde y halló un espécimen de una rara serpiente cuando trabajaba en el fondo de su casa. «Se me pasó entre los pies pero no me atacó», dijo a Elonce TV acerca del encuentro con «la bicha».
El trabajador se encontró con una serpiente Coral, cuya mordida es letal. Pese a ello, pudo atraparla y encerrarla en una pecera donde aún la tiene a la espera que alguien le diga qué hacer con la víbora. «Tiene más de 50 centímetros, pero es muy tranquila, aparentemente», aclara el preocupado vecino de Oro Verde.
Veneno muy potente
Existen 14 especies de serpientes venenosas en Argentina. Se estiman que ocurren tres muertes por cada 8000 mordeduras, lo que se da debido a la rápida administración de los antídotos.
Hay seis especies de serpientes de coral en territorio argentino. No miden más de 70 centímetros, y suelen estar entre la hojarasca, donde cazan. Poseen un veneno muy potente, capaz de matar a una persona. Sin embargo, no son agresivas así que no suelen causar mordeduras.
Según se pudo establecer, la encontrada en la zona del Hipódromo de Oro Verde es una serpiente conocida como Coral Chaqueña («Micrurus pyrrhocryptus»).
Mordido por una víbora
«Consulté a veterinarios y llamé a varios entes públicos para saber si la suelto o resolver qué hacer, porque hay mucha ignorancia sobre estos bichos», contó Cristian a Elonce TV y agregó que «me dijeron que dosis de antídoto para Yarará hay en todos lados, pero de estas Coral no», afirmó.
Al respecto, recordó que comprobó la existencia de dosis para la mordedura de Yarará, porque «hace un par de años tuve un encontronazo con una y me tuvieron que inyectar», resaltó el trabajador.
Los ataques de coral
Las serpientes de coral pueden ocasionar accidentes letales en casi toda la geografía argentina, aunque producen menos mordeduras que las yararás, supo Elonce.
Las corales, cuyo nombre remite a la coloración rojo brillante de los anillos que rodean su cuerpo, son serpientes muy poco agresivas y tímidas, de hábitos por lo general subterráneos, que solamente morderán si se las manipula.
Efecto letal
Por otra parte, por el tipo de dentición y el tamaño de su boca, muchas de ellas no alcanzan a inocular sus toxinas. De todas maneras, cuando se produce el encuentro «cercano» y existe inyección efectiva del veneno, representa una urgencia médica.
El veneno tiene una acción mayoritariamente neurotóxica y puede llevar a la muerte por parálisis de los músculos intercostales y el diafragma. El antiveneno anticoral («anti-Micrurus») es producido desde hace varias décadas por el Ministerio de Salud de la Nación.
Su función
Pese a la preocupación y el temor que puede generar un encuentro con este tipo de serpientes, el vecino de Oro Verde tomó la decisión de mantenerla en cautiverio, hasta tomar otra decisión. Cristian relató a Elonce TV que «estuve investigando y pude saber que es una Coral, pero la verdad, es que no la quería matar porque estas bichas también tienen su función con las ratas y esas cosas», explicó a cerca de por qué decidió atrapar a la serpiente.
Especies y antídotos
Hay especies de serpientes de las que hay menos cantidad y por ende, conseguir especímenes para producir los antídotos es más difícil. Es el caso de la serpiente de coral.
Especialistas explican que hay muchos menos accidentes que involucran a estas serpientes por la propia biología del animal. Al respecto, revelan que el 97% de los accidentes se producen por una yarará, por víboras de coral es mucho menor el riesgo. Cada 1.000 accidentes, uno es por una coral.
Las serpientes Coral Son difíciles de conseguir, y cuando se capturan sirven para obtener los antivenenos que se producen en el instituto Malbrán. (El Once)