Estas precipitaciones menores fueron producto de la sobresaturación ambiental más que de condiciones de inestabilidad, es decir, no hubo desarrollos nubosos significativos.
Dentro de este contexto, las reservas se mantienen en niveles muy favorables, sin restricciones en las zonas con intenciones de siembra para la fina. A lo largo de esta semana, en forma progresiva, se consolidó viento del noreste que no hace más que incorporar aire húmedo en toda la zona del Litoral y la Mesopotamia.
La inestabilidad en niveles superiores de la atmosfera logra generar una onda que permitirá romper el predominio del viento noreste y lluvias.
A pesar de que estas no son fechas habituales para el desarrollo de tormentas, la coyuntura ambiental es favorable.