Una familia sufrió un violento asalto cerca de la medianoche del miércoles, en su vivienda ubicada a la altura del kilómetro 7,5 de la ruta nacional 130 -frente al acceso del Balneario Municipal Rocha de Villa Elisa-, en la zona de Colonia Caraballo.
El episodio comenzó alrededor de las 23 y se extendió por aproximadamente 15 minutos. En la tranquilidad de la noche, cuando el matrimonio Guiffrey Bavastro -de 52 y 54 años de edad, respectivamente- y sus tres hijas -de 21, 18 y 14 años- se encontraban durmiendo, cuatro hombres encapuchados y con guantes irrumpieron en la casa, forzando la puerta principal con una barreta.
Valiéndose de un arma de puño -que presuntamente se trataría de un revólver-, redujeron al padre y ataron sus manos hacia la espalda con alambre de fardo, exigiendo “la plata de los misioneros”, haciendo referencia a un presunto negocio que las víctimas desconocían. Luego, hicieron lo propio con el resto de la familia, cuyas mujeres quedaron tiradas en el piso mirando hacia abajo. “Vinieron con un dato falso y nos hicieron pasar una noche de terror. Alguien les dijo que habíamos vendido animales y nada que ver”, confió a El Entre Ríos la damnificada.
Al no conseguir su cometido, por tratarse de un dato falso o erróneo, los delincuentes se llevaron una caja metalizada con un cheque al portador y dinero en efectivo, además de más fondos que se encontraban en otros lugares del domicilio: 7 mil pesos y 150 dólares en total, sumado a dos celulares, ambos marca Hyundai, modelo 545. “Nos dejaron sin nada, nos sacaron todo. Hasta tuvimos que pedir plata para comprar mercadería”, relató entre lágrimas la mujer, haciendo referencia al local comercial de productos regionales que tiene la familia lindante a la casa.
Los cuatro hombres se retiraron amenazando a las víctimas que no los denunciaran porque si no iban a volver. Para huir del lugar, se llevaron una Renault Kangoo roja (modelo 2009) propiedad de la familia, que minutos después fue hallada abandonada en la autovía, a la altura de San José. “Fue de terror, 15 minutos de terror. El peor momento de mi vida y no se lo deseo a nadie, porque realmente fue una pesadilla. Ahora espero que no los encuentren, porque es peligroso. Entran y salen de la cárcel, es así, porque las leyes están hechas para ellos, lamentablemente”, agregó la víctima, visiblemente angustiada y descreída tras el traumático episodio.
Cuando los delincuentes ya se habían marchado con el botín, una de las hijas -que se había escondido en el interior de un mueble- logró liberar a su padre de las ataduras y asistirlo por un corte en el cuero cabelludo que había sufrido a causa de los golpes, para finalmente dar parte a la Policía.
Intervinieron en el lugar del hecho, personal de Comisaría Villa Elisa, de Investigaciones y de Criminalística de la Jefatura Departamental de Policía, cuyas autoridades siguen trabajando con los datos obtenidos hasta el momento para lograr la localización e individualización de los autores del hecho. Todo con conocimiento de la fiscalía en turno de Colón, habiéndose iniciado un expediente caratulado como “De oficio policial, por supuesto delito de robo agravado por el uso de arma de fuego y privación ilegítima de la libertad”. (El Entre Ríos)
