Dos delincuentes armados irrumpieron en una vivienda, apuntaron de manera amenazante a los ocupantes, robaron y escaparon. Ocurrió en horas de la madrugada en Concepción del Uruguay. Los ladrones siguen prófugos.
La tranquilidad que solía tener el tradicional barrio Puerto Viejo de Concepción del Uruguay, empieza a quedar casi en el recuerdo. La zona sur de la ciudad se ve envuelta desde hace tiempo en una ola de delitos, como arrebatos en la calle.
El jueves a la madrugada se registró un hecho casi sin precedentes en las viviendas de esa parte de dicha ciudad de la Costa del Uruguay: dos delincuentes armados irrumpieron en una vivienda, apuntaron de manera amenazante a los ocupantes, robaron, se escaparon y permanecen prófugos.
Una vez que los damnificados se sintieron seguros, pudieron dar aviso a la policía y relatar el trago amargo que vivieron: una pareja de estudiantes, oriundos de Santa Anita, dormían en la habitación hasta que escucharon un ruido cuando el reloj marcaba las cuatro de la mañana.
Dos delincuentes armados ingresaron a la vivienda, en calle Calderón 716, entre Moreno y 3 de Febrero, luego de forzar una ventana. Los ladrones entraron a la casa, sorprendieron a la pareja que dormía y cometieron el atraco.
Según consta en el relato; las víctimas advirtieron el ruido que produjo la apertura de una ventana de la habitación, que se encuentra en la planta alta del domicilio. Cuando tomaron conciencia de lo que estaban viviendo, ya había ingresado un primer intruso con un arma de fuego. El ladrón los amenazó y exigió la entrega de plata. Además, aseguraron que obligó a una de las víctimas a ir hasta la planta baja. Una vez abajo, el delincuente se apoderó de una notebook, un celular y una mochila. Por último, obligando al damnificado a abrir la puerta de la casa y así darse a la fuga con su cómplice.
Tras el hecho, tomaron intervención efectivos de la Sección Judiciales de la Departamental Uruguay, así como las Divisiones Investigaciones y Criminalística, pero hasta el momento, no habría pistas sobre los posibles autores, ya que los damnificados no habrían reconocido a los ladrones, publica el diario La Calle.