El entrenador que había sido escrachado como “abusador” fue denunciado este viernes ante la fiscalía de turno.
A pocas horas de que se conociera el descargo del Club Regatas ante un escrache público contra un entrenador de su plantel de natación, se realizó una presentación formal ante la justicia. El Miércoles Digital pudo confirmar que pasado el mediodía de este viernes 7 de diciembre, se presentó una denuncia contra Humberto Quinodoz, por abuso sexual.
La presentación fue realizada ante el fiscal de turno, Juan Pablo Marino Gile. La denunciante es una joven uruguayense, profesional de la salud mental, quien testificó contra Quinodoz, declarando por más de una hora, y quien además insta a sumarse a la acción legal iniciada a quienes han sido víctimas de las acciones del denunciado. “Me acompañó la fiscal Gabriela Seró, e hice la denuncia ante el fiscal de turno”, contó a este medio. Y agregó: “Es importante que se animen a denunciar, porque es lo único que vale, la denuncia formal. Y no hace falta que denuncien haber sido abusadas, sino también algo que hayan visto, todo sirve para que se sepa la verdad”.
Según contó la denunciante, hace meses que se vienen reuniendo diferentes mujeres que se reconocen como víctimas de acciones que no dudan en calificar como “abuso”, ocurridas años atrás, cuando las damnificadas formaban parte del plantel de nadadoras de Regatas, y tenían entre 10 y 14 años de edad. En las últimas semanas algunas de ellas decidieron impulsar una denuncia contra el entrenador.
Meses atrás, una pintada realizada en las paredes externas del club había dado como resultado una entrevista con las autoridades de la institución, en la que hubo un compromiso verbal de ocuparse de la situación. Pero al pasar el tiempo y no visualizar acciones efectivas (como por ejemplo la separación del entrenador), las damnificadas decidieron avanzar en las acciones legales.
“Sería importante que los padres les crean a sus hijos, que estén más atentos a lo que ellos dicen, y sobre todo a lo que no pueden decir”.
Quinodoz lleva décadas en el club, y aunque las autoridades afirman que “en los más de cien años de vida de la institución, donde pasaron miles de personas, jamás ocurrió hecho semejante alguno”, (Ver: El Club Regatas desmiente…) las impulsoras de la denuncia aseguran que, en la comunidad vinculada al club, eran muchas las personas que sabían lo que ahora ha sido presentado a la justicia. Por otro lado, hay un antecedente de un entrenador de hockey femenino, que fue denunciado judicialmente por abuso, de manera que la afirmación es por lo menos discutible.
A partir de los escraches en las redes, comenzaron a acumularse nuevos testimonios, como por ejemplo: “Este hombre está hace 30 años en el club y quienes lo conocimos sabemos lo que es”, dice Agustina, una de las que se animaron a expresarse por esa vía. Y añade: “Sería importante que los padres les crean a sus hijos, que estén más atentos a lo que ellos dicen, y sobre todo a lo que no pueden decir”. Maru agrega: “No estamos escrachando porque sí, no desviemos el foco de la cuestión, Quino es un abusador y el club tiene que hacer algo”. Gabriela agrega: “Yo puedo dar fe. Y nunca nadie hizo nada, y sigue estando todo el tiempo con chicos”. También Ivana expresa su enojo: “Todos los adultos cómplices, callados”.
Según contó la denunciante, hace meses que se vienen reuniendo diferentes mujeres que se reconocen como víctimas.
En paralelo, una profesora de la institución convocó a una reunión en la sede del Club Regatas, esta misma tarde desde las 19, para dialogar entre las familias (cuya preocupación se ha visto acrecentada en estos días) con las autoridades de la institución.
Por A.S., El Miércoles Digital.