El Magistrado Rubén Chaia dijo “que no hay vacío legal, pero sí un problema para rastrear a quienes acosan en las redes, que suelen actuar anónimamente”.
El presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial, Rubén Chaia, alertó sobre la utilización de las redes sociales para el acoso a menores o distintos tipos de agresiones. En diálogo con RADIO MAXIMA, el Magistrado advirtió que las calumnias e injurias a través de las redes, pueden ser denunciadas.
En el marco de una charla organizada por el Colegio de Magistrados de Formosa, la pasada semana Chaia integró in panel en el que se trató la temática de la Violencia Laboral; Violencia de Género; Femicidio; Ciberacoso contra niños, niñas, adolescentes y mujeres.
Chaia precisó que “en nuestro país hace unos años se ha sancionado la ley 26.904 que incorpora al Código Penal el artículo 131, previendo penas de seis meses a cuatro años de prisión para quien se acerque a un menor a través de las redes sociales, con fines sexuales determinados”.
Concretamente, el artículo 131 del Código Penal dice textualmente: “Será penado con prisión de seis (6) meses a cuatro (4) años el que, por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, contactare a una persona menor de edad, con el propósito de cometer cualquier delito contra la integridad sexual de la misma”.
Respecto de la violencia que se observa en las redes sociales, donde cualquier persona puede proferir calumnias o injurias sin control alguno, Chaia puntualizó que “el delito de calumnias e injurias puede ser perseguido porque es de vieja data, lo que ocurre que la mayoría de los comentarios de esas características que proliferan en las redes sociales se hacen en forma anónima y es difícil rastrear quien los realiza”
Asimismo Chaia indicó que “no se trata de un vacío legal sino que hay un grave problema de investigación. Además, las personas que tienen esta clase de comportamiento en las redes sociales, apelan a identidades o perfiles falsos, por lo cual también es muy difícil rastrearlos”. (Radio Máxima)
