El avistaje se dio gracias a una cámara trampa que se colocó hace unos meses en la zona de una reserva al sur de la provincia de Entre Ríos. El instrumental permitió captar imágenes de un espécimen de gato montés que deambula por el lugar.
El hecho se dio en la reserva natural “Las Piedras”, la primera Área Natural del departamento de Gualeguaychú, que tiene una superficie de más de 140 hectáreas protegidas.
El lugar suele ser refugio para diferentes especies autóctonas que incluyen más de 200 especies de flora, y diferentes especies de fauna, como hurones, gatos de pajonal, comadrejas overas y coloradas, ciervos colorados y axis, estos últimos introducidos en la zona.
Las cámaras trampa, o cámaras espías, son una tecnología que se utiliza para hacer relevamiento de fauna.
En función de lo que se quiera investigar, las cámaras se ubican en diferentes ambientes funcionando tanto de día como de noche, ya que cuentan con sensores de movimiento e infrarrojos que permiten obtener imágenes en la oscuridad.
De acuerdo a la información brindada por los guarda parques de la reserva natural “Las Piedras”, las cámaras se instalan en una zona específica durante al menos 15 días en los que se evita cualquier intervención humana para que el olor no ahuyente a los animales, y luego de ese lapso se puede o bien retirar la cámara, descargar las imágenes y ubicarla en otra zona, o descargar las imágenes en el lugar, realizar muchas veces un cambio de pilas y seguir registrando esa misma zona para obtener otras posibles tomas del animal en cuestión.
¿Qué se sabe acerca del Gato Montés?
Es una especie autóctona, solitaria, de hábitos nocturnos, pero si no se siente amenazada, anda también de día. Es terrestre y de rastros frecuentes, buen trepador por lo que prefiere sitios arbolados y gusta mucho del agua. Tiene dos a tres crías por año cada camada.
Se alimenta principalmente de pequeños roedores como cuises y ratones, y también aves. Por su apariencia y tamaño, el Gato Montés puede confundirse con un gato doméstico, sobre todo en los frecuentes casos de melanismo. Mide entre 42 a 66 cm de largo (cabeza y cuerpo) más unos 24 a 36 cm de cola. Su peso de 2 a 6 kg.
Su distribución geográfica es extendida: se puede encontrar en Bolivia, el sur de Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina y el sur de Chile. Esto es debido a que se adapta a ambientes muy diversos como pastizales, montes y bosques.
Situación
El Gato Montés es la especie más común de felino silvestre del sur de América del Sur y por el momento no presenta serios problemas de conservación.
Durante la década del 70 y 80 fue el “gato” más explotado por el comercio peletero. Entre 1976 y 1979 se exportaron de Argentina 400.000 pieles de felinos, correspondiendo el mayor porcentaje a Gato Montés. Durante los años siguientes su demanda se redujo considerablemente.
Actualmente, en Argentina y los demás países donde habita está protegido, por lo tanto, la caza, comercio, transporte y exportación de ejemplares vivos y sus productos está prohibido.
De igual manera, aunque en menor medida se lo sigue cazando ilegalmente por su piel y principalmente por el supuesto daño que provoca a las aves de corral.
Aunque es una especie protegida, la fragmentación y pérdida de hábitat también es un factor que está afectando a la especie.
Si bien su estado de conservación no enfrenta serios problemas, a nivel general en algunas regiones su número parece haber disminuido. El Día