La «minicorrida» cambiaria que disparó el dólar a $ 21,20, la suba del precio internacional del crudo Brent a u$s 73 el barril y el incremento del valor por tonelada del biodiésel para su mezcla obligatoria con gasoil aceleraron la decisión de las petroleras de aplicar otro aumento en la tarifa de los combustibles.
Según los cálculos de las compañías productoras y algunos estacioneros a los que accedió ámbito.com, la próxima suba de naftas rondará el 6,57%.
Desde en octubre de 2017, cuando el Gobierno nacional autorizó la liberación del precio de los combustibles, hasta abril pasado, la versión Súper de YPF en la ciudad de Buenos Aires se encareció 28,72%. En los surtidores el litro pasó de $ 19,74 a $ 25,41 en tan solo siete meses.
Si se tiene en cuenta que antes de la desregulación el dólar cotizaba $ 17,36 y el barril de Brent se pagaba u$s 57,69, y que hoy el tipo de cambio escaló a $ 21,20 y el petróleo a u$s 73, el nuevo valor de la nafta Súper de YPF debería ser $ 32,38 por litro, o sea, un 6,57% más que el mes pasado. (Ámbito)