La caída en el consumo se consolida en Concepción del Uruguay y los datos no sólo surgen desde el Centro Comercial y los diferentes locales que hacen a las ventas en el casco céntrico de nuestra ciudad sino que, ahora, desde la Feria Franca que reúne cada sábado a productores de la región. Los mismos coinciden en que los bolsillos están cada vez más flacos y con ello han disminuido notablemente las compras de los productos.
Dar pelea
Daniel Torresán, referente de la Feria Franca de nuestra ciudad, hizo referencia a la actualidad del sector y comentó: “los feriantes siguen trabajando, si bien la economía no los está ayudando tratan de seguir. En puestos la feria está bien para la cantidad de clientes que asisten, es decir, que está bien equilibrado; porque si hay demasiados puestos y pocos clientes la cosa no anda”. Pero aún así “se está sintiendo la economía y la crisis y para los feriantes es muy difícil mantener algo que producen junto con el aumento de los servicios y eso se lo tienen que reflejar a la verdura, por ejemplo. No está fácil la cosa para el productor, pero los muchachos tratan de seguir pese a esta situación”, relató.
“Todos buscamos precios, llegamos a la góndola y vemos qué nos conviene, qué no y donde compramos. La feria no está ajena al problema económico que tenemos y más que la feria tiene una clientela de jubilados y gente trabajadora que tiene que laburar todos los días para tener su sustento y la plata no alcanza, se hace difícil”.
La feria
En cuanto a los productos que se comercializan Torresán explicó: “seguimos trabajando con los alimentos de siempre, hay huevos, leche fresca, manteca, salame, pan casero, verduras, frutas, cereales. El producto que siempre se comercializó está hoy en la feria y este lugar sigue su marcha con los objetivos para los que fue creada, que es brindar a la gente productos frescos”.
“Habilitamos a las 6.30 horas y ni bien ponen el puesto comienzan a vender porque empezó muy alta la temperatura y eso nos apura en los stands; la idea es que a los 11 no quede más nada porque no se puede de otra forma. Cuando llegue el invierno trabajaremos más tranquilos de otra manera”, remarco en cuanto al desarrollo de la actividad.
Por otro lado el referente comentó que actualmente hay 26 o 30 feriantes cada sábado y que el número ha bajado debido al verano. “De todas formas está bien el número para la gente que va, todavía que la feria se puede mantener, esta es la realidad”, lamentó Torresán y añadió: “cuando digo que se pueda mantener hago referencia a los precios de las cosas y el insumo con el que se trabaja. Este es un momento muy difícil. Hace 16 años que hacemos la feria y hoy es un momento muy difícil realmente, pero seguimos alentando a los feriantes a que vengan y a que continúen con el trabajo”. (La calle)