Advierten que no debería consumirse a diario por ser muy calórico aunque si es de buena calidad puede ser un buen aporte nutricional.
En estos días, un helado aparece como una opción verdaderamente codiciada. Ni hablar si se trata de niños. Se transforma en merienda en la escuela, algo que se suma por la tarde e incluso si es de tamaño considerable a veces hasta reemplaza una comida.
La invasión de este producto en la dieta lleva a preguntarse si es una elección nutricional válida.
La respuesta de las profesionales consultadas fue un poco difícil de aceptar para los fanáticos del helado: no dan permiso para comerlo todos los días.
Difícil sobrellevar el verano con esta realidad. La buena noticia es que si bien es un producto calórico también tiene buenos aportes nutricionales cuando es de buena calidad, por lo que en esos casos es considerado un alimento.
La licenciada en Nutrición Mónica Lizárraga explicó que se le atribuye rango de alimento porque está hecho a base de lácteos que aportan proteínas y calcio. «No reemplaza una comida sino que se considera un postre pero aporta muchas calorías», advirtió, esto fundamentalmente por su alto contenido de azúcares simples.
Sin embargo advirtió que según su criterio debería comerse con una frecuencia mínima de tres o cuatro días. A modo orientativo sugirió que cada ese lapso podrían ingerirse entre 100 y 150 gramos (serían entre 3 y 5 bochas aproximadamente).
Podrían comerse entre 100 y 150 gramos cada 4 días.
Pueden contener leche o queso mascarpone, puede tratarse de productos descremados o enteros. En este último caso tendrán más aporte de grasas.
Pero además, si tienen otros agregados como frutas secas o frescas sumarán beneficios. Por ejemplo si incluye frutos del bosque se tendrá un extra de antioxidantes, mientras que están por demás reconocidos los beneficios de las frutas secas que aportan fibras, ayudan a prevenir enfermedades y producen saciedad.
Los helados de agua se consideran dietéticos.
Es que el único aporte que tienen es el del azúcar que contiene. La ingeniera química Emilia Raimondo detalló que 100 gramos de helado de agua contiene 79 calorías, mientras que la porción estándar suele ser de 60 gramos, es decir dos bochas, lo cual serían unas 48 calorías.
En cambio, la misma cantidad de un helado de crema claramente lo supera, aunque dependerá de lo que contenga. Como ejemplo 60 gramos de un helado con galletas, chocolate y maní contiene 250 calorías. En definitiva el quíntuple que uno de agua.
Por otra parte advirtió que de acuerdo a nuevos parámetros se apunta a reducir el consumo de azúcares simples.
Fuente: Los Andes