La investigación por corrupción y abusos contra el abogado Gustavo Rivas, tuvo una derivación laboral con el despido del empleado de la farmacia que grabó una conversación con el polémico abogado. La empresa salió a aclarar el incidente.
La causa judicial contra el abogado Gustavo Rivas, tuvo hoy un nuevo giro, no ya en los tribunales, sino con una derivación laboral, por el despido de dos empleados de Farmacity que grabaron una conversación con el letrado imputado de corrupción de menores.
Tras el escándalo por la difusión del video, donde hablan risueñamente sobre los aspectos de los abusos y la utilización de un salamín, es que la empresa decidió disponer los despidos, Por ello es que envió un comunicado de prensa a UNO para informar los motivos que llevaron a esa decisión.
«Ante la notoriedad de los hechos públicamente conocidos, Farmacity aclara que dos colaboradores de la sucursal de Gualeguaychú, Entre Ríos, fueron desvinculados con causa en el día de hoy por haberse comprobado que incumplieron normas básicas y reglamentos internos de la compañía, a partir de la realización y difusión en redes sociales de un video que se considera impropio y agraviante por una cuestión sumamente sensible para la comunidad», se indicó desde la empresa.
En la explicación, se hizo saber: «Luego de ser notificados, uno de estos colaboradores protagonizó un lamentable incidente por el cual tuvo que ser hospitalizado y se encuentra fuera de peligro. La compañía lamenta lo sucedido e informa que lo acompañará brindándole la asistencia necesaria». (UNO)