Una movilización provincial mutitudinaria como la anterior organizada por los sindicatos docentes se expresó en las calles del centro de la ciudad de Paraná y frente a la Casa de Gobierno. La recomposición salarial, los descuentos de días de paro y la firma de declaraciones juradas estuvieron en el centro de los reclamos y críticas hacia el Poder Ejecutivo. Asimismo, se insistió en el rechazo al proyecto de reforma jubilatoria que impulsa el gobierno.

Desde numerosos puntos de la provincia llegaron diferentes delegaciones de docentes en colectivos de larga distancia que se acercaron hasta el centro y calle Alameda de la Federación, para manifestarse en la primera jornada de las 72 horas de paro dispuestas por el Congreso de Agmer para esta semana.

Un grupo de trabajadores estatales nucleados en ATE acompañó la protesta y el acto realizado en la Plaza Mansilla.

El secretario adjunto de AGMER seccional Paraná, Martín Tactagi, aseguró que el nivel de adhesión en Paraná fue «altísimo, entre 95 y 98%, sobre todo teniendo en cuenta que fue muy serio el apriete que hizo el Gobierno con la declaración jurada, aún en esas condiciones, los docentes, en escuelas donde les dijeron que les iban a pasar paro, decidieron venir presentando la revocatoria que el gremio les indicó».

Por su parte, desde el Gobierno se informó que el acatamiento al paro rondó el 50%. Cabe recordar que, además de Agmer, AMET y Sadop también adhirieron a la medida de fuerza de este martes, miércoles y jueves.

La movilización partió desde las inmediaciones de la Plaza Alvear y recorrió distintas calles hasta llegar a la plaza 1 de Mayo, continuó por Corrientes y tras una breve pausa frente a la Caja de Jubilaciones para expresar el rechazo de los trabajadores a la reforma previsional, continuó su marcha hasta calle La Paz para finalizar en la explanada de Casa de Gobierno.

La negociación entre el Gobierno y los sindicatos sigue estancada. El gobernador Rogelio Frigerio realizó una nueva oferta el domingo donde informó que la provincia iba a pagar Fonid y Conectividad, que el gobierno nacional decidió dejar de pagar a inicios de año. Se aguarda por posibles nuevos anuncios esta semana en medio de un clima de incertidumbre por lo que ocurrirá con los salarios de los trabajadores y con los días de clases que se siguen perdiendo.

 

El gobierno informó que «el paro docente tuvo el acatamiento más bajo de los últimos años»

Según el relevamiento de presentismo docente realizado desde el Consejo General de Educación (CGE), el 43% de los docentes entrerrianos se presentaron a trabajar en las escuelas de la provincia, pese a los cinco días de paro convocados desde Agmer, a los que adhirieron AMET y Sadop. En comparación, desde el gobierno se considera que la medida de fuerza es «la de más bajo acatamiento de los últimos años».

Si bien faltan computar los datos de los turnos tarde y noche, los números del turno mañana mostraron una baja sustantiva en la adhesión a la dura medida de fuerza que afecta a las familias entrerrianas, principalmente a los 433.000 chicos en edad escolar, según datos del CGE.

El relevamiento oficial mostró departamentos en los que los índices de presentismo fueron notablemente altos: por ejemplo, en Diamante fue a trabajar el 83% de los maestros; y en Nogoyá asistió el 66%.

En promedio, en la última huelga de la semana pasada se presentó a trabajar el 28% de los maestros, este martes el presentismo creció al 43% y se espera que siga aumentando de cara a los paros convocados por los sindicatos para miércoles y jueves, se informó. Desde el CGE se anticipó que los días de paro serán descontados.

Cabe recordar que el gobierno provincial otorgó a los maestros a partir de septiembre un aumento salarial que llevó el sueldo mínimo de bolsillo para el docente de jornada simple (20 horas semanales) que recién se inicia en la profesión a 565.000 pesos.

Además, «con un enorme esfuerzo» y una inversión de más de 70.000 millones de pesos, se cubrirán con recursos provinciales los ítems Fonid y Conectividad que dejó de pagar el gobierno nacional.

De esta manera, un docente que trabaja jornada simple recibirá por ese concepto 58.000 pesos adicionales, mientras que un maestro que trabaja jornada completa cobrará 116.000 pesos extra.

«También se incluyó en el nuevo aumento la cláusula de garantía respecto de la inflación solicitada por los gremios; se colocó al haber mínimo por encima de la canasta básica, tal como reclamaban, y se aumentó el ítem movilidad, entre otras demandas. A la vez, se contempló el pedido gremial de que todos los incrementos sean remunerativos», se informó desde Casa de Gobierno.

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