«Sería contradictorio hablar del esfuerzo de docentes, alumnos y padres y sacarles las vacaciones», aseguró el ministro de Educación nacional, Nicolás Trotta, quien también descartó que se pueda suprimir tiempo del receso de verano.
El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, aseguró que «nos gustaría pensar el regreso de las clases en agosto, pero no sabemos. Hay que analizar la curva de contagio de estas semanas después de la apertura algunos sectores de trabajo, cómo les va a los países europeos donde regresaron a clases. Tenemos que escuchar día a día al comité de expertos y partir de eso tomar las mejores decisiones priorizando la salud de nuestra comunidad educativa».
Al ser consultado sobre la posibilidad de continuar las clases durante enero y febrero, el ministro de Educación nacional lo descartó de plano.
«Sería contradictorio reconocer el enorme esfuerzo de los maestros, alumnos y las familias y suprimir las vacaciones de verano». Además, advirtió que las provincias con enorme caudal de turismo «necesitarán las vacaciones para iniciar la recuperación económica».
Por las mismas razones, descartó suprimir el receso de invierno. «Las vacaciones de invierno no se modificarán, además necesitaremos un corte para producir un descanso de toda la comunidad educativa en un momento de tanta angustia como este», señaló.
En ese marco, Trotta ratificó lo dicho hace una semana en diálogo con Elonce TV sobre la aplicación de un sistema dual. «No vamos a volver todos juntos al mismo tiempo, para sostener el distanciamiento los alumnos volverán a clases por mitades, siempre según la realidad edilicia de cada escuela. Un lunes irá la mitad de los estudiantes de un curso, el martes la otra mitad, mientras que los del lunes se llevan actividades para hacer en el hogar; el miércoles revisarán lo que hicieron en el hogar y se sigue con el plan de trabajo y así sucesivamente. Vamos a tener que imaginar estos caminos hasta que se logre una vacuna que resuelva la problemática del COVID-19».
Trotta aseveró que «el año escolar no se perderá, pero tenemos que ser realistas pues estamos en un año absolutamente excepcional y eso nos lleva a pensar nuevos caminos y alternativas».
Aseguró en declaraciones al diario Primera Edición que no perder el año escolar «implicará muchos de desafíos de reorganización, de intensificación de los objetivos pedagógicos para este 2020 y la articulación con el 2021″ e incluso el funcionario nacional indicó que, de ser necesario, se articulará también con el ciclo lectivo de 2022».