Un informe realizado por la Municipalidad de Gualeguaychú mostró cifras alarmantes en relación a la incidencia del cáncer en la ciudad. Se elaboró en base a un reclamo y a la preocupación expresada por un colectivo de vecinos. Con los datos en mano, el gobierno local buscó apoyo económico e institucional tanto en el gobierno provincial como en la Nación para poder profundizar el estudio y para diseñar medidas de acción y prevención, pero hasta el momento no obtuvo respuesta. El secretario de Salud del municipio, Martín Roberto Piaggio, describió la situación al programa televisivo Cuestión de fondo (Canal 9 Litoral).
La situación en Gualeguaychú es crítica: en el periodo 2001-2011 se registraron 4.022 casos incidentes, de los cuales el 50,8 por ciento fue en mujeres. Es decir, un promedio de 366 nuevos diagnósticos por año, o sea poco más de un nuevo caso por día. De estos, el 87 por ciento se produjo en personas de más de 44 años. El principal tipo de cáncer diagnosticado fue el de mama, que representó el 16 por ciento del total de casos incidentes para ambos sexos y el 31 por ciento entre las mujeres. El cáncer de colon y recto ocupa el segundo lugar para ambos sexos con porcentaje muy similar del 15,6 por ciento.
Respecto a la mortalidad, desde 2000 a 2015 se produjeron 2.743 defunciones por tumores malignos, con un promedio anual de 171 muertes. Es decir, una muerte cada dos días. El 56 por ciento correspondió al sexo masculino y el 78 por ciento de los fallecidos tenía más de 59 años.
Los primeros sitios tumorales determinantes de la mortalidad en hombres de Gualeguaychú fueron: pulmón, próstata, colon y recto, páncreas y estómago. En las mujeres, los principales tipos en orden de frecuencia fueron mama, colorrectal, pulmón, páncreas y cuello uterino.
“Comenzamos en 2016 haciéndonos eco de un reclamo y una sentida preocupación de muchos vecinos de la ciudad, organizados en un colectivo denominado Stop Cáncer. Pedían información sobre el estado de situación en la ciudad de la enfermedad. Convocamos a todas las instituciones y actores locales y también a estamentos provinciales y nacionales”, contó a Cuestión de fondo Martín Roberto Piaggio, secretario de Salud y Desarrollo Social de la Municipalidad de Gualeguaychú.
“Intentamos poner claridad sobre esta situación y transmitir a los vecinos qué es lo que efectivamente estaba pasando”, acotó el funcionario.
“En 2017 pusimos un en marcha un estudio epidemiológico descriptivo de la situación que analizó información de mortalidad por un período de 15 años. Se revisaron bases de datos de 2000 a 2015 desagregado por sexo y por edad. También se hizo un estudio de incidencia, para determinar los nuevos casos de cáncer a lo largo de 10 años”, describió luego.
“A raíz de dar respuestas a la preocupación de los vecinos y con el compromiso ambiental con el que venimos trabajamos, apuntamos a abordar fundamentalmente las causas. Y ahí se dispararon varias iniciativas y se fortalecieron otras en las que ya veníamos trabajando. Una de las más importantes es la profundización de una línea de cuidado en el primer nivel en lo que hace a la prevención que desarrollamos en los nueve centros de salud”, comentó Piaggio.
También mencionó ordenanzas tales como la que regula la prohibición del uso de agrotóxicos en el ejido municipal y las que prohíben el glifosato. Indicó el funcionario que se realizan, además, monitoreos en las industrias radicadas en la zona y se trabaja en conjunto con las organizaciones sociales.
Ya con los resultados del estudio en mano, el municipio mantuvo reuniones con representantes del gobierno provincial, nacional e incluso del Instituto Nacional del Cáncer. Todos ellos asumieron verbalmente el compromiso de colaborar y brindar los medios necesarios para continuar con estas medidas, pero al pasar los meses y no lograr concreciones, las autoridades de Gualeguaychú formalizaron mediante notas los pedidos que venían sin respuesta.
Tal es el caso de la misiva enviada a Roberto Pradier, del Instituto Nacional del Cáncer, a quien se le acercó el extenso informe epidemiológico de la situación del cáncer en la población residente en Gualeguaychú, reflejando la necesidad de fortalecer el trabajo que excede al gobierno municipal y solicitar financiamiento para continuar con la investigación y el trabajo preventivo.
Notas con el mismo tenor se enviaron a la ministra de Salud de Entre Ríos, Sonia Velázquez; a Diego Garcilazo, de la Dirección de Epidemiología de la cartera entrerriana; y a la directora del Instituto Provincial del Cáncer, Claudia Enrique, todas ellas sin respuesta alguna.
Posteriormente, ya en junio de este año, las autoridades de Gualeguaychú enviaron una nota nuevamente a la ministra Velázquez para poder avanzar con los convenios de cooperación entre la provincia y el Instituto Nacional del Cáncer que habían caducado y había que rehacer. En esta misma nota resaltan la preocupación por el atraso en los datos del Registro Provincial Poblacional de Tumores que tiene años de demora.
Finalmente, una de las últimas notas enviadas por el municipio fue a la directora del Instituto Nacional del Cáncer, Julia Ismael, destacando la satisfacción por la actualización de los convenios entre provincia y Nación y solicitando poder concretar la implementación de los programas de inmediato. Cosa que hasta el día de la fecha no sucedió.
“Entendemos que debemos organizarnos y ver de qué manera, con estos organismos, podemos seguir avanzando el año que viene. Hasta acá lo hemos venido a instancias de una decisión y un financiamiento con recursos propios del municipio. Pero esto debería estar en un plano de responsabilidad primaria de los gobiernos nacional y provincial, compartida con el gobierno local”, completó Piaggio. (Análisis)