«Hubo actas falsas, testigos falsos y un teléfono que no había sido robado», resumió el fiscal José Arias, en la audiencia ante la Justicia. Hay efectivos detenidos, desde ayer. ¿Por qué pidió que sigan presos por 45 días?
El fiscal José Arias requirió que los dos integrantes de la Policía de Entre Ríos, con tareas en la Comisaría Tercera de Concordia, continúen detenidos porque entiende que, de quedar en liberta, pueden «bloquear la investigación».
Añadió, además según pudo escuchar El Entre Ríos presente en la sala, que los policías «demostraron ser capaces de armar pruebas falsas y que tienen la formación necesaria y el poder para entorpecer la investigación».
Lo dijo este miércoles por la mañana, en la audiencia que se desarrolla en los Tribunales de Concordia, presidida por el juez Darío Perroud y que tiene al doctor Rafael Briceño como abogado defensor de los policías.
El fiscal calificó el accionar de los funcionarios policiales como de «una defraudación de carácter grave a la administración de Justicia».
Argumentos de la Fiscalía
El 25 de Julio Daniela Cano denuncia robo y señala como autor a Pais. Se trata del robo de teléfono con línea telefónica determinada. En consecuencia, la Comisaría Tercera apresa a Pais, en horas de la tarde, y le secuestran el celular supuestamente de Cano.
Así empezó el relato del representante del Ministerio Público Fiscal de Concordia, exactamente a las 9:40 de este miércoles 11 de octubre.
Prosiguió, recordando que entonces la Justicia ordena que quede detenido, mientras que la defensa presenta un Habeas Corpus aduciendo que la detención fue ilegal porque lo habían sacado de su domicilio y no tenía el celular en cuestión. El fiscal confió en la Policía ya que creyó que fue detención en vía pública. Es decir, el doctor Arias consideró que el proceder policial había sido legítimo por lo que el habeas corpus se rechazó y el tipo fue preso.
Fue ahí cuando se pide una pericia al celular y la línea del teléfono, detectándose que el 24 de julio cruzó mensajes con un celular del Policía López, o que éste se comunicaba con País o con la dueña del celular que terminó confesando que el celular robado era otro y revela otra cosa: que López le avisó que harían aparecer como que País tenía el celular.
«López le hizo firmar un acta mentirosa a la mujer» dijo Arias y recordó que «convocó a uno que hicieron aparecer como testigo de la detención pero aclaró que jamás estuvo y que le falsearon la firma en el acta».
Siempre según el relato de la acusación, otra testigo que hicieron aparecer en el acta le confesó a Arias que le hicieron firmar el acta pero ella no vio nada de la detención de «Bote» (tal el apodo de Alexis, de 24 años). Dijo que le pidieron un favor. Confesó que lo hizo porque es conocido de los policías.
«O sea que hubo actas falsas, testigos falsos, teléfono que no había sido robado. Todo armado», resumió el hombre encargado de exponer las acusaciones. Pidió, entonces, que cese la prisión preventiva de Pais ya que «había sido ilegítimamente privado de su libertad».
«La víctima del robo contó cómo fue instigada a una falsa denuncia», dijo Arias que también reclamó medidas tales como la realización de pericias de las actas, del teléfono de López y el detalle de los llamados de López.
Expresó, finalmente, su máximo pedido al juez Perroud: que los policías (el comisario Juan Federio Ifran y el suboficial López) sigan detenidos preventivamente por 45 días «porque pueden bloquear la investigación y porque demostraron ser capaces de armar pruebas falsas, teniendo la formación necesaria y el poder para entorpecer la investigación».
Desde el banquillo de los acusados, policías piden libertad
Su defensor aseguró que los efectivos no pueden entorpecer la investigación, aunque dio margen a una eventual «prisión domiciliaria». Ambos están acusados de armar una causa por el robo de un celular.
Rafael Briceño, tras escuchar los argumentos de Fiscalía, hizo uso de la palabra en defensa del oficial Juan Federico Ifran y el suboficial López. Primero, tal como escuchó El Entre Ríos presente en la audiencia, rechazó el pedido de Arias, aduciendo que «López como suboficial no tiene poder para hacer lo que se le imputa».
Agregó, sobre el particular, que la única prueba que tiene Arias es lo que dicen los testigos y la víctima del robo «pero nada se ha establecido objetivamente, qué faltan las pericias y que no hay pruebas para justificar que los policías estén detenidos».
Le reprochó al hombre del Ministerio Público, además, no haber considerado la condiciones personales indicando que López es un efectivo «con 28 años de excelente servicio sin quejas de nadie».
Sobre Ifran, en tanto, explicó que es oficial nuevo y tal vez en un exceso de celo se haya visto involucrado sin que eso implique reconocimiento alguno, aclaró.
Enfatizó, por esas razones, que «la prisión preventiva es una medida extrema» y aclaró que sus defendidos no pueden entorpecer las pericias pendientes por lo que, en vez de que continúan presos, «alcanza con una prohibición de acercamiento a testigos y víctima del robo».
Concretamente pidió la excarcelación de ambos policías de la Comisaría Tercera de Concordia, aunque también concedió que, si no los excarcelan, «que le den el beneficio de la prisión domiciliaria».
Allí fue cuando intervino Arias, que aclaró que «hay evidencias objetivas por las llamadas entre López y la víctima Cano», además de recordar que López tiene causas pendientes, entre otras, por incumplimiento de deberes de funcionario público. «Está imputado», precisó.
Añadió, desacreditando la supuesta buena foja de servicios que pretendió mostrar Briceño, que López «también está denunciado por adornos ilegales en otra causa». Insistió, entonces, en la necesidad de decretar la prisión preventiva: dijo que hay peligros procesales si los testigos de sienten presionados por los dos policías en libertad.
Briceño retomó su alocución, tras la interrupción del fiscal, y apuntó al hombre que había sido detenido por el supuesto robo del celular. Dijo que «Pais no es un bebé de pecho» y que, «a lo mejor ese exceso de celos (por el prontuario de «Bote») pudo haber llevado a los policías a excederse».
Pidió, al juez Perroud, finalmente que se considere la presunción de inocencia e insistió en que no hay forma de entorpecer la investigación. (El Entre Ríos)