Una mujer policía de 24 años se autolesionó en Concordia y permanece bajo atención médica. En lo que va del año, seis efectivos de la fuerza se quitaron la vida, y crece la preocupación por la salud mental en los efectivos de la policía entrerriana.
Nuevo episodio que conmociona a la fuerza. Una joven agente de la Policía de Entre Ríos, identificada como F.A.E., de 24 años, intentó quitarse la vida el pasado domingo en jurisdicción de la Comisaría Primera, al sur de Concordia, reveló 7Páginas. Según informaron fuentes confiables, la uniformada estaría atravesando un cuadro de depresión y ansiedad, agravado posiblemente por problemas económicos, se indicó en la publicación. En medio de un estado de crisis emocional, se autolesionó con un arma blanca.

El hecho se suma a una preocupante estadística: en lo que va del año, seis integrantes de la fuerza provincial han fallecido por suicidio, la mayoría de ellos jóvenes. Este martes, la noticia volvió a poner en debate el impacto del estrés laboral, las exigencias del servicio y la falta de contención emocional en el personal policial.
Antecedentes y medidas preventivas
El caso más reciente antes de este episodio ocurrió el 5 de agosto en Paraná, cuando otra mujer policía se quitó la vida utilizando su arma reglamentaria. A raíz de ese hecho, la conducción de la fuerza dispuso licencia obligatoria para todo el personal en la provincia, con el fin de prevenir nuevas tragedias.

Sin embargo, la repetición de situaciones críticas en poco tiempo evidencia que las medidas adoptadas hasta el momento, no estarían siendo suficientes para contener el deterioro de la salud mental de algunos de los efectivos. El tema preocupa tanto a las autoridades como a las familias de los uniformados.
Condiciones laborales y presión económica
En diálogo con 7Páginas, un suboficial de Concordia expuso la presión económica que enfrentan muchos policías. “Para poder sostenerme económicamente, debo trabajar entre 15 y 16 horas diarias, sumando servicios adicionales para no caer en un salario de pobreza”, reveló.
La combinación de largas jornadas, desgaste físico y mental, sumada a la inestabilidad financiera, aparece como un factor que potencia el riesgo de crisis emocionales en la fuerza. Especialistas en psicología laboral señalan que es urgente reforzar los equipos de asistencia, generar espacios de escucha y mejorar las condiciones de trabajo para evitar que estos episodios sigan en aumento.
7Páginas – Elonce