El precio de la carne vacuna debería bajar en los próximos días, tras las subas registradas en las semanas previas, señalaron directivos de las asociaciones que representan a frigoríficos, comercios, matarifes y abastecedores.
La baja de precios de la carne vacuna respondería a la caída de la demanda interna, la normalización de la oferta de hacienda y la fuerte merma que existe en los embarque al exterior.
«La lógica dice que debería bajar el precio de la carne al público debido a que en principio la demanda interna ha caído, sobre todo de los restaurantes y hoteles, y en los hogares no se consume con tanta violencia como se consumía antes. Por lo tanto, es lógico que el precio, normalizada la oferta de hacienda, tienda a disminuir», explicó el presidente de la Cámara de la Industria y Comercio de las Carnes (Ciccra), Miguel Schiariti.
Para el presidente de la Cámara de Matarifes y Abastecedores (Camya), Leonardo Rafael, el incremento de los precios en la cadena de comercialización de carne vacuna en las últimas semanas se debió tanto al efecto del cese de comercialización por parte del campo en la segunda semana de marzo, como también a cuestiones climáticas y de sobredemanda en los días a que el Gobierno decretara la cuarentena por el coronavirus.
«En el aumento de la carne hay tres patas: una es que venimos de una semana de paro agropecuario en el cual hubo un cese de comercialización de hacienda del 9 al 12 de marzo; después estuvimos 4 días de lluvias donde se perjudico el abastecimiento y después vino el anuncio de la cuarentena y la gente salió como loca a abastecerse», comentó a Télam Rafael.
Según el dirigente empresario, estas fueron las razones por las cuales el precio máximo pagado por kilo de novillito en pie en el mercado de Liniers pasara de valer 101 pesos el kilo a principios de marzo a tocar un precio máximo pagado de 117 pesos la semana pasada.
Por su parte, la media res descargada en las carnicería pasó de un promedio de 205 a 215 pesos a principios de mes a 220/240 en estos últimos días.
En la rueda de ayer en el mercado de Liniers el precio máximo del novillito de ubicó en 112,5 por kilo con una oferta de más de 11.000 cabezas en total para todas las categorías.
Hoy, con una oferta de casi 600 cabezas, el precio cayó hasta los 108 pesos.
«Lo que sucedió fue producto de un combo que hizo que sucediera algo que en situaciones normales no tendría que haber pasado, pero ya hubo una baja en la hacienda en Liniers. Sumado que ahora no hay problemas de abastecimiento y que no hay peligro de que suceda eso vamos a tener más novedades de bajas porque las ventas bajaron casi aun 10% y los bolsillos no dan abasto», concluyó Rafael.
Por su parte, el presidente del Mercado de Liniers, Oscar Subarroca, aseguró que «va a empezar a caer el precio porque hoy hay muchos problemas y uno de ellos es que los exportadores no están pudiendo mandar carne a Europa. Esto se a va a volcar al mercado interno, aumentando la oferta».
En este punto coincidió Schiariti, quien sostuvo que «los exportadores tienen bastante carne en cortes que no pueden mandar a la Unión Europea (UE) que está cerrada por el coronavirus. Esa carne va a salir a venderse en los supermercados seguramente a precios de liquidación, por lo que va a haber una sobreoferta en el mercado interno. Por eso es muy probable que en 10 o 15 días si no haya nuevas lluvias torrenciales se retraigan los precios».
Por último, el presidente de la Asociación de Propietarios de Carnicerías de Capital Federal, Alberto Williams, dijo desconocer los fundamentos de la suba de la carne y se mostró escéptico respecto a la posibilidad de que los precios bajen.
«El motivo de por qué subió lo queremos saber, porque más demanda no hay. Es un disparate a los precios que ha llegado hasta ahora. Este lunes entro con 10 pesos de suba y ya había subido la semana anterior. Yo quisiera que haya un reacomodamiento de los precio hacia abajo, pero hace tiempo que lo que subió nunca bajó», concluyó el dirigente carnicero.