A principios de octubre, luego de un trabajo de campo del personal de la coordinación Gualeguay del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), surgió un alerta sobre la situación de siete chicas de entre 13 y 17 años que presuntamente sufrieron delitos contra la integridad sexual. Desde el organismo presentaron un extenso informe sobre la situación de las adolescentes ante la defensora de Pobres y Menores, María de los Ángeles Banno, quién elevó una denuncia ante el Ministerio Público Fiscal. La causa quedó a cargo del fiscal Carlos Gutiérrez. Ya hay dos hombres detenidos y se está investigando una multiplicidad de conductas delictivas que podrían terminar revelando la existencia de una red de trata, lo que modificaría la competencia del caso. El fiscal y el coordinador de Copnaf dialogaron con el programa televisivo Cuestión de fondo y revelaron detalles sobre la metodología utilizada, que además de abusos y maltratos incluye consumo y venta de estupefacientes.
Inmediatamente se ordenó la detención de un hombre de 47 años, que alegó tener una relación de noviazgo con una de las menores, de 13 años, aunque habría aprovechado para tener acciones sexuales de forma coactiva hasta que la menor resultó con problemas de salud, lo que destapó la situación y el accionar del Copnaf. El hombre tiene causa de 2017 por tenencia de estupefacientes.
Martín González, titular del Copnaf Gualeguay, dijo a Cuestión de fondo que la situación se detectó a partir del trabajo del organismo con algunas de las adolescentes y sus familias. “Fueron surgiendo datos y cuestiones muy puntuales que nos hacía notar alguna vulneración de derechos grave. Los equipos técnicos, a través de un trabajo responsable y minucioso, fuimos elaborando un informe y cuando lo tuvimos lo canalizamos a través de la Defensoría de Pobres y Menores, cumpliendo con el protocolo de abuso, porque entendimos que no había, en principio, total dimensión de parte de los adultos responsables de lo que estaba sucediendo”, explicó.
“Fuimos detectado situaciones de abuso, de maltrato y otras que tenían que ver con otras problemáticas aún más graves que fueron tomando la tipificación penal correspondiente en Fiscalía, como la de explotación sexual infantil. También se daba cuenta de consumo y facilitación de drogas”, añadió el funcionario, quien anticipó que de los testimonios de las menores pueden surgir más casos.
La primera detención se realizó el 8 de octubre, mientras que con el avance de la investigación y la declaración en Cámara Gesell de la niña y de otra menor más, se detuvo el 1° de noviembre a otra persona, de 49 años, también de Gualeguay. Ambos continúan detenidos en Jefatura Departamental por determinación de la jueza de Garantías Alejandra Gómez. Se los imputa por abuso sexual en perjuicio de una menor calificado por violencia y por acceso carnal, corrupción de menores, promoción de la prostitución y suministro y tenencia de estupefacientes.
“Los detenidos están privados de su libertad uno desde principios y el otro desde mediados de octubre. Hay una menor de 13 años y de la entrevista a otra chica testigo, que es familiar, surgió que había otras pasando por la misma situación de abuso y ejercicio de la prostitución, más el consumo de sustancias prohibidas”, señaló al programa Carlos Gutiérrez, fiscal de Gualeguay.
“Hay una multiplicidad de conductas ilícitas que se están investigando. Por ahora no podemos llegar a hablar de trata de personas porque sería prematuro, pero con el correr de la investigación puede llegar a haber un indicio fuerte de que nos encontramos ante un delito de esta naturaleza, en cuyo caso vamos a plantear el tema de la competencia”, aclaró el funcionario judicial.
En principio, no habría elementos suficientes para enmarcar la causa en una situación de trata de personas, tampoco se podría hablar de captación, aunque había un ámbito que facilitaba estas situaciones.
El hombre de 47 años mantenía una supuesta relación de noviazgo con la nena de 13 años y le “ofrecía”, a su vez, estar con otras personas a cambio de dinero y, principalmente, de estupefacciones. El resto de las menores iba “de visita” y ambos imputados generaban los ámbitos para facilitar el ejercicio de la prostitución a cambio de dinero o drogas.
En Cámara Gesell una de las menores contó que a la menor de 13 años se le practicó un aborto clandestino por un embarazo por la relación con esta misma persona.
Desde la Justicia todavía no descartan que se trate de un lugar de ablande para una red de trata. Reconocen que no son las prácticas que se utilizan habitualmente como, por ejemplo, la privación de la libertad y situaciones mucho más extremas de castigos y violaciones.
Por otra parte, un dato no menor es que la madre de la menor de 13 años había denunciado ante el fiscal Eduardo Santos de Gualeguay un hecho similar. Denunció que su hija estaba secuestrada por esta persona de 47 años en un bungalow. La policía fue hasta el lugar, comprobó que el adulto estaba con la menor y el fiscal enmarcó la causa en el artículo 141, que pena la privación ilegítima de la libertad. Pero la causa nunca avanzó a pesar de que pasaron más de dos meses.
Hasta el momento, han pasado por la Cámara Gesell cuatro chicas, dos de 17 años y dos aún menores. Las más grandes estuvieron este miércoles en Cámara Gesell y negaron los hechos de prostitución, aunque reconocieron la situación de la menor. (Análisis)
