Fue sentenciado a 2 años y 10 meses de prisión efectiva por robar una moto. A fines de mayo había sido penado a 7 meses de prisión por golpear a su pareja. En su haber también hay un arrebato y el robo en una casa cuando tenía 19 años.
Yair Nicolás Zamora, de 21 años, tiene una vida dedicada exclusivamente al delito en la ciudad de Gualeguaychú. Desde que cumplió la mayoría de edad, quedó registrado en los legajos policiales y judiciales cada uno de sus actos, que en la actualidad lo llevaron a cumplir irremediablemente una condena de prisión efectiva, publica El Día.
La última detención de este delincuente ocurrió el 10 de julio a raíz de un incendio intencional que se había originado en un automóvil Volkswagen Surán estacionado en calle Concordia al 900. Se verificó que además de los daños por el fuego, el vehículo presentaba la luneta y las cubiertas rotas.
La investigación obtuvo rápidamente información sobre los responsables y la Policía salió en su búsqueda. Fue así que localizaron a Zamora a bordo de una moto Yamaha YBR 125, acompañado de una mujer de 24 años. Se confirmó que la moto en la que transitaba había sido robada el día antes en calle Paraná casi San Martín, frente al estacionamiento de un supermercado.
Por el robo de este vehículo fue llevado a juicio abreviado. Se lo declaró reincidente y fue condenado a 2 años y 10 meses de prisión, que ya cumple en la Unidad Penal 9. Pero Zamora tiene más antecedentes.
El más reciente es del 29 de mayo, cuando fue condenado por violencia de género y se convirtió en el condenado número 18 por este delito del 2017. Había recibido una pena de 7 meses de prisión efectiva, pero nunca fue preso porque no se presentó a cumplir la condena cuando adquirió firmeza y recién comenzó a cumplirla cuando quedó detenido por el robo de la moto a mediados de julio.
El 27 de febrero, Zamora ingresó al domicilio ubicado en Pasteur al 800 y mantuvo una fuerte discusión con su pareja, hasta que en un momento dado la tomó del cuello, la aprisionó con sus manos y le propinó un golpe de puño en el pómulo que le ocasionó las lesiones que tras la denuncia de la víctima fueron informadas por el médico policial.
Cuando recibió esa condena en mayo no pudo beneficiarse con una pena excarcelable debido a sus antecedentes. Cuando fue denunciado en febrero, gozaba de una libertad condicional por una condena que se le había dictado dos años atrás y solo le restaban unos meses para finalizarla. Por lo cual, a ese juicio llegó con la pena cumplida.
En abril de 2015, cuando Zamora tenía 19 años, reconoció en un juicio abreviado ser el autor de un hecho ocurrido el 11 de noviembre de 2014 y recibió una condena de dos años y un mes de prisión efectiva por un robo calificado por escalamiento en grado de tentativa. De allí fue llevado a la UP9 hasta el cumplimiento de esa pena que se agotó a principios de 2017.
Cerca de las 5 de la madrugada de ese 11 de noviembre del 2014, Zamora, junto a un cómplice que posteriormente recibió una probation, escaló una pared de más de dos metros, con puntas de metal como protección, e ingresó al garaje de una casa ubicada en el barrio Pueblo Nuevo. Una vez allí, previo dañar el burlete de la puerta trasera y de uno de los ventiluz de una camioneta Peugeot, entre ambos delincuentes intentaron robar elementos de trabajo que había en el interior, como ser: una potencia de sonido, una caja con micrófonos, algunos inalámbricos, una caja de herramientas y una consola de sonido, entre otras cosas. Pero nada de esto lograron llevarse porque fueron sorprendidos por la Policía, que llegó al lugar alertada por los vecinos.
Para ese entonces, Zamora ya registraba una condena de un año de ejecución condicional, impuesta por la Cámara de Juicios de Gualeguaychú en mayo de ese mismo año, porque le había arrebatado la cartera a una mujer en las inmediaciones de Ayacucho y 3 de Caballería.