Identificaron a siete personas mayores de edad, secuestraron gran cantidad de dinero en efectivo, vehículos, y bolsas con diversas cantidades de prendas de vestir y elementos electrónicos por un valor que superó los $4.500.000.
Fue tras allanamientos en diferentes domicilios y locales comerciales de la ciudad de Concordia, realizados por personal de Prefectura bajo las órdenes del Juzgado Federal de Concepción del Uruguay a cargo del Dr. Pablo Seró, en el marco de una investigación por supuesta infracción a la Ley N° 22.415 (Código Aduanero), que reprime el tráfico ilícito de mercaderías.
Las pesquisas demandaron a los prefectos varios meses de investigación lográndose determinar que se adquirían diferentes elementos de industria textil y electrónica en la ciudad paraguaya de Encarnación, las que eran introducidas al país, «engañando» los controles mediante el empleo de «paseros», los que adquirían e ingresaban al territorio nacional con escasas cantidad de mercaderías, posteriormente trasladadas en vehículos tipo utilitarios hasta Concordia, donde eran acopiadas, para su posterior venta en esa localidad, ciudades vecinas de la provincia, como así también se detectaron envíos a las ciudades de Buenos Aires, Córdoba y Rosario.
Con el correr de la investigación, los agentes federales detectaron distintas maniobras con la que la organización buscaba introducir al mercado legal bienes, producto de las ganancias que le generaban las ventas. Por ello, paralelamente al delito de contrabando, se llevaron a cabo tareas tendientes a vislumbrar maniobras relacionadas con el delito de lavado de activos. Pudiéndose establecer actividades típicas de este delito, como por ejemplo la adquisición de numerosos inmuebles, vehículos y moneda extranjera.