El agente Froilán Pedroza de 44 años, muerto por un delincuente en un allanamiento en Gualeguaychú, era el mismo que en la mayoría de los traslados de Nahir Galazar a los tribunales, cuidara que a la joven no le pasara nada.
El destino quiso que el hombre que en la tarde de este domingo están despidiendo en Gualeguaychú, tras haber sido asesinado por un delincuente en un allanamiento, era la misma persona que aparecía en las imágenes y fotografías custodiando el traslado de Nahir Galarza desde o hacia los tribunales de esa ciudad.
Autoridades policiales, institucionales, de seguridad y la comunidad de Gualeguaychú están acompañando a los familiares de Froilán Pedroza, de 44 años, el uniformado que fue ultimado de un disparo en la cabeza. Hoy a la tarde se realiza el sepelio en la necrópolis local.
Pero como mueca de la vida, Pedroza hoy forma parte de una de las páginas más triste de Gualeguaychú, y a la vez es la persona que custodió y brindó seguridad en los operativos de traslado desde la Comisaría del Menor y la Mujer hasta los tribunales de Nahir Galarza, la joven imputada y detenida por el crimen de Fernando Pastorizzo.
Pedroza por formar parte del Grupo Especial de la Policía que estaba a cargo junto a otros uniformados y uniformadas de la custodia personal de Nahir.
La orden que recibió este grupo en el caso Pastorizzo, fue: primero controlar que la joven no escapara y segundo que no sufriera ningún incidente o ataque de parte de terceros en sus diligencias en los tribunales de Gualeguaychú.
En numerosas imágenes quedó el trabajo de Pedroza casi abrazando a Nahir para superar el asedio de los periodistas y camarógrafos, como también el acompañamiento a corta distancia al ingresar o salir de los tribunales o la dependencia policial done se encuentra alojada.
Pedroza siempre utilizó el uniforme característico de la división a la que pertenecía, de color marrón para identificar a un uniformado capacitado para integrar el cuerpo especial de la Policía.
De esa manera, formó parte de los trabajos de mayor riesgo en los operativos policiales, tal es el caso, el allanamiento donde lo mataron de un tiro en la cabeza. (UNO)