El hallazgo de un cadáver con una zapatilla y una gorra genera conmoción. Intentan determinar si pertenece al joven desaparecido hace dos años y cuya búsqueda llegó a Entre Ríos
Un cadáver con una zapatilla y una gorra con visera genera conmoción en la localidad de San Antonio Oeste, provincia de Río Negro. Una familia halló los restos de una persona la tarde del sábado, alrededor de las 17. Investigan si se trata de Rodrigo Hredil, el joven que desapareció hace más de dos años, de su casa en Las Grutas, de la misma provincia.
De acuerdo a la información brindada por fuentes judiciales, se encontraron varios huesos dispersos, desgastados y que no llegan a conformar un esqueleto completo; a lo que e sumó la ropa. Sin embargo, en diálogo con el medio local Diario Río Negro, detallaron que en los restos de un maxilar se apreciaría la presencia de ortodoncias, que se asemejarían a las utilizadas por Rodrigo.
El hallazgo tuvo lugar en un campo de San Antonio Oeste, ubicado a la altura del kilómetro 1.128 de la ruta 3, a 700 metros de la costa con el Mar Argentino. El sector fue resguardado y horas más tarde se inició un rastrillaje en presencia de los fiscales de Viedma Paula Rodríguez Frandsen y Pedro Puntel, y la local Mariela Coy.
Intentan determinar de quién se tratan los restos. Además de Rodrigo, en la región hubo otro joven desaparecido que nunca fue hallado. Walter Calvo tenía 19 años cuando fue visto por última vez en San Antonio en 2009 y nunca apareció, si bien los indicios señalan que habría muerto ahogado.
La desaparición de Rodrigo
Rodrigo tiene actualmente 23 años. Se ausentó de su casa el 31 de julio de 2015, al padecer un brote psicótico. La camioneta que manejaba apareció abandonada con la llave puesta en un camino rural ubicado a la vera de la ruta 251, alrededor de 15 kilómetros en dirección a General Conesa.
Desde el punto en que se encontró la camioneta hasta el sitio del hallazgo de los restos humanos hay alrededor de seis kilómetros en línea recta.
La búsqueda
Desde el momento de su desaparición, su familia inició un largo proceso de búsqueda que hasta el momento no ha tenido resultados favorables. Durante los dos años y dos meses que está perdido, numerosos testigos de diversas provincias reportaron haberlo visto, pero luego se determinó que no se trataba de Rodrigo.
A raíz del brote psicótico que sufrió, los profesionales que asesoraron a la familia de Rodrigo, señalaron que el joven puede encontrarse desorientado. La búsqueda llegó incluso a Santa Fe y a Entre Ríos.
«Él está desorientado por un problema de salud y sin documentación. Al parecer se moviliza ‘haciendo dedo'», indicó Celia, la madre del joven, en diálogo con AHORA, el pasado 4 de agosto.
«Seguimos buscando»
Tras la difusión de la noticia sobre el hallazgo de los restos, la familia manifestó: «Esperamos el resultado de las pruebas de ADN, hasta tanto no tengamos eso, seguimos buscando y esperando a Rodrigo como cada día, desde hace 2 años y 2 meses».
Canal 9
