“Si tuviera un ratito me encantaría poder darle un beso y decirle gracias” dijo Néstor García a La CaLLe. el dolor, la militancia y el ejemplo a seguir.

Dice Eduardo Galeano; “recordar, del latín re-cordis, volver a pasar por el corazón”. Así lo hizo Néstor “Yuyo” García en diálogo con La Calle: “cuando nos casamos con Andrea decidimos estar tres años sin hijos y un tiempo antes de cumplir esa fecha decidimos tenerla a Micaela. Fue nuestra primera hija y como pasa con el primero uno siente cosas muy especiales. Fue una chica que estuvo estimulada desde muy chica, le dábamos todo, entre las tantas cosas que hicimos fue averiguar por matronatación en un viaje que hicimos a Buenos Aires porque acá en la ciudad no había. Nos recomendaron un libro, lo compramos y lo ejercitamos nosotros mismos en la pileta que teníamos en una casa que alquilamos” relató el papá de Micaela, mientras recordaba a su hija.

 

El carácter militante

“Había una sola lista en el centro de estudiantes del Colegio y ella opinaba que eso no podía ser, porque los alumnos tenían que poder elegir y así armó otra opción con sus compañeros. Lo mismo hizo en la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) donde la tenían como medio revoltosa”, contó sonriendo sobre la juventud de la joven.

“Ella nunca hizo las cosas porque sí. Cuando empezó danza aeróbica se propuso competir y así fue; hicimos de sostén y profesores mientras conseguíamos maestros en Capital. Una vez cada quince días viajaba allá, entrenaba en la cocina de casa y así salió campeona Panamericana de trío y Subcampeona panamericana de grupo al otro año. Calificó al primer mundial, después al segundo mundial y posteriormente la militancia la llevó para otro lado” narró Yuyo con luz en la mirada, mostrando el orgullo de papá y reflejándose también un poco.

Como un espejo, Néstor nos contó que en su juventud fue militante estudiantil en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). “Hacíamos actividades barriales. En ese momento, por ejemplo, no era fácil mirar un partido de fútbol porque no había tantos televisores y nosotros poníamos uno en el aula magna para mirar el partido de Argentina y se llenaba de chicos y familias del barrio La Concepción, que es donde nací. Después me alejé, me desilusioné con la política y en cada oportunidad Micaela me trataba de arrimar. Ella era más tenaz, las dificultades las tomaba como desafíos. Empezó militando en el barrio Los Palos, después pasó a Cantera 25, Villa Mandarinas y en la última etapa también en Ex Fapu. Estudiaba durante la semana y los sábados se iba temprano al barrio, a veces no nos veíamos por la cantidad de actividades que tenía”.

 

“Los que murieron peleando viven en cada compañero”

“Hay fuegos que arden la vida con tanta pasión que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende” dice Galeano. Micaela era muy querida y reconocida, por sus capacidades y humildad, entre sus compañeros y compañeras de militancia, la gente del barrio, sus amigas de baile y los profesores que tuvo en su vida como estudiante. En sus actividades políticas y sociales, hace pocos años se había metido de lleno en la cuestión de género. En contra del patriarcado, el lenguaje sexista, la violencia económica, verbal y psicológica que atraviesan las mujeres, luchaba cada día para derribar la cultura machista.

“Los fines de semana cuando venía controlaba que sus hermanos hagan la cama, limpien y ordenen. A mí me hacía lavar los platos, poner la mesa y sostenía que los varones teníamos que hacer las misma tareas que las mujeres desde la casa y desde chiquitos”, contó Yuyo, manifestando además que meses antes de su femicidio, trabajaba en un proyecto de mujeres emprendedoras que hoy está vigente. El mismo busca que trabajadoras uruguayenses expongan sus trabajos, los vendan, sea rentable y puedan así encontrar su solvencia económica .

 

El impacto nacional

El femicidio de Micaela trascendió los medios locales para ocupar la agenda nacional e internacional. Sus ideas, luchas y sueños llegaron a cada rincón para transformarse en canción, militancia y proyectos. En nuestra ciudad las movilizaciones fueron históricas. Mujeres, hombres, jóvenes, pequeños y pequeñas acompañaron cada grito en reclamo de justicia.

Diputados y diputadas de los bloques del Frente para la Victoria, Libres del Sur, Movimiento Evita y Frente de Izquierda presentaron en mayo pasado un paquete de proyectos de ley, denominado “Leyes Micaela García”, para prevenir la violencia de género.

Yuyo García y Andrea Lescano (su mamá) desde los primeros días de junio, tienen en sus manos la personería jurídica de la Asociación Civil local que lleva su nombre y, desde su corto tiempo de gestación, lleva concretadas varias actividades y tiene en marcha muchos desafíos.

“Si debo referirme a la trascendencia del hecho de Micaela en particular, creo que incidieron muchas cuestiones. Una de ellas, por ejemplo, es que no se logró imponer, en los medios nacionales sobre todo, una imagen negativa de ella. En estas cuestiones lamentablemente los medios juzgan a la víctima y se preguntan qué estaba haciendo la chica para que la mataran y con Micela intentaron hacerlo pero no lo lograron. Otra tiene que ver con la opinión pública que como sabemos es formada por la clase media y mi hija era de clase media entonces mucha gente de clase media y alta se sintió tocada y pensó equivocadamente, porque le pasa a cualquiera; “también nos puede pasar a nosotros”, opinó Néstor en cuanto al alcance y la repercusión de la vida de “La Negra”.

 

Micaela como bandera

“Siento mucha admiración por mi hija. Cada decisión que tomo inevitablemente pienso en qué decisión hubiese tomado ella porque no se equivocaba. Lamentablemente ahora estoy haciendo un montón de actividades que ella deseaba que yo las hiciera al lado de ella y no las hice. Hoy lo hago porque es lo que ella quería, también es lo que a mí me gusta pero antes estaba desilusionado con la actividad política y me quedé en un ambiente más acotado”, comentó Yuyo sobre su vida hoy.

En referencia a la creación de la Fundación y su accionar pacifista, conciliador y en búsqueda de justicia, desde un primer momento, el papá explicó: “lo hacemos desde el convencimiento de que las cosas hay que hacerlas institucionalmente. Así somos nosotros y así la criamos a Mica, no tengo dudas de que ella estaría actuando de la misma forma”.

 

El respeto institucional

“Cualquier cosa que sale en los medios yo salgo a opinar y hablo de los tres poderes porque la gente piensa que son las leyes y la verdad es que el sistema falla por todos lados. Hay organismos creados a nivel nacional y provincial que no tienen presupuesto para funcionar y están creados por ley. Wagner estaba libre porque el Superior Tribunal de Justicia de la provincia dice que el artículo 14 del Código Penal, que hace referencia al que el reincidente no tiene beneficio de salidas transitorias, es inconstitucional y Wagner era reincidente. Él estaba libre porque un grupo de personas dijeron que ese artículo de la ley era inconstitucional, como si fuese un mero trámite y ese artículo la Corte Suprema lo declaró constitucional en su momento. Entonces me pregunto ¿es sólo que no hay leyes, o las personas que las aplican lo hacen acorde a sus conveniencias? Y por otro lado hay leyes que crean los organismos y el Poder Ejecutivo no les da presupuesto para su desarrollo, como por ejemplo el control en la provincia a la salidas transitorias como pasó en nuestro caso”, declaró García consultado sobre el funcionamiento de la justicia y agregó: “las cárceles son una pausa, no ayudan a la inserción social de la persona en lo más mínimo”.

 

El acompañamiento

En cuanto a la presencia de familiares y amigos, y el apoyo de la sociedad Yuyo comentó: “me sentí bien acompañado, sobre todo por la comunidad de la UTN , fue impresionante el acompañamiento de la ciudad y fueron unos poquitos casos los que manifestaron rechazo.

Lo que le molestó a mucha gente fue el abrazo a Micaela, la forma en que se hizo. Como si tuvieran el derecho de decirnos a nosotros cómo debíamos despedir a nuestra hija. Esa parte también es algo que debemos cambiar como personas, que desde nuestro lado a veces nos sentimos con el derecho de decidir lo que hace la otra persona con su vida privada, pero a mí no me pueden decir cómo tengo que despedir a mi hija y lo hicimos como ella fue, como ella vivió y es como la queremos recordar, militando, con gimnasia aeróbica, con mucho ruido y mucha fiesta porque ella era así. A pesar del dolor”.

“Si tuviera un ratito me encantaría poder darle un beso y decirle gracias por todo lo que me dejó. El orden natural de que el padre es el ejemplo del hijo se cambió y es totalmente al revés. Lo digo con mucho orgullo porque algo tuvimos que ver en como era ella” concluyó su papá en declaraciones a este medio. (La calle)

Radio: 102.5 FM | TV: Canales 52 & 507 | LRM774 Génesis Multimedia ((HD Radio & TV))

Deja un comentario sobre la noticia