Ahora se informó a Elonce TV que la más pequeña de las dos niñas que permanecieron «extraviadas» durante 11 horas, fue retirada de la custodia de sus padres y permanece al cuidado de sus abuelos maternos.

La desaparición de dos niñas de 4 y 10 años de edad generó conmoción en barrio Belgrano de la capital entrerriana. Después de 11 horas de intensa búsqueda, las chiquitas aparecieron.

Hasta el momento no se sabe a ciencia cierta qué pasó con ellas durante el tiempo que permanecieron extraviadas. Sólo se conoció a través de familiares que la niña de diez años debió ser hospitalizada en el San Roque y durante la tarde de este jueves, fue dada de alta.

Ahora, se informó que la más pequeña fue retirada de la custodia de sus padres y permanece al cuidado de sus abuelos maternos.

«En últimas horas de la noche de ayer se decidió que respecto a la nena más chica, era conveniente adoptar una medida de protección, y se definió que esté residiendo transitoriamente con los abuelos maternos porque desde los equipos técnicos se consideró que no estaban dadas las garantías de cuidado», confirmó a Elonce TV, Ariel Villanueva del área de Restitución de Derechos del Copnaf.

«Se evalúa la condición de los adultos responsables en el cuidado», adelantó Villanueva.

Se recordará que según habían informado fuentes policiales, las pequeñas aparecieron 11 horas después de iniciada la búsqueda, en una zona cercana a su domicilio. Desde la fuerza se dijo que «estaban jugando en la casa de una vecina y ahí se habrían quedado dormidas».

Pero para los familiares, a las menores les habían hecho «algo» ya que cuando las encontraron «estaban empastilladas», o al menos eso pensaron ya que la niña de 10 años estaba desvanecida y debió ser hospitalizada.

Fue así que este jueves se vivieron momentos de tensión en barrio Belgrano cuando un grupo de vecinos decidió quemar la vivienda en la que habrían estado las niñas.

Desde Copnaf indicaron a este medio que cuando las niñas fueron localizadas, las trasladaron hasta la guardia del organismo e inmediatamente se tomó contacto con los familiares. «En un primer momento, ambas niñas volvieron a sus domicilios», dijo Villanueva.

«Se mantuvieron entrevistas con los familiares, no con las nenas porque estaban bastante nerviosas por la situación que habían atravesado», agregó.

A dos días de los acontecimientos, ninguna fuente oficial aclaró qué pasó con las pequeñas mientras permanecieron desaparecidas. La familia adujo que la de 10 años estaba «empastillada» y que tenía «dos pinchazos en el brazo», pero no sabían si habrían sido producidos «por una jeringa o una mordedura de víbora».

Pero Villanueva explicó que «la nena estuvo internada en hospital San Roque, descartándose cualquier situación de maltrato físico, abuso o ingesta de sustancia». «No existió ninguna situación de esa característica», insistió, al tiempo que bregó por «disminuir los rumores y para que la investigación con el grupo familiar de las niñas aporte datos certeros de lo que sucedió». (El Once)

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