Tanto el Arzobispo de San Juan como su hermano Gustavo, no presentan lesiones, pero por indicación de los médicos el eclesiástico deberá guardar reposo por un tiempo.

A pesar de no presentar lesiones orgánicas y óseas, los médicos aconsejaron que él y su hermano Gustavo, pasaran la noche internados.

El estado clínico del Arzobispo de San Juan, monseñor Jorge Lozano y su hermano Gustavo tras el accidente que sufrieron este lunes en el departamento Valle Fértil de la provincia cuyana, es muy favorable teniendo en cuenta la magnitud del vuelco. A las 10 de este martes el eclesiástico y su hermano fueron dados de alta para continuar con el reposo en domicilio.

Según informaron a primera hora de hoy, ambos «se encuentran bien; pasaron bien la noche», internados en el Hospital Rawson de la ciudad de San Juan al que ingresaron ayer lunes y donde se les hicieron los controles y exámenes de rigor y, ninguno de los dos, presentaba lesiones orgánicas u óseas.

No obstante, y por indicación de los médicos por el momento, Lozano deberá guardar estricto reposo y por el momento y hasta nuevo aviso no retomará sus actividades. (Máxima Gchú.)