Se facilita de esta manera el acceso al financiamiento de los pequeños y medianos productores porcinos, porque se elimina la necesidad de contar con garantías adicionales -como hipotecarias o prendarias-. Con este instrumento se reducen los tiempos de aprobación y se minimiza la documentación solicitada.
Los créditos a valor producto para este sector fueron presentados en marzo y la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, con el objetivo de expandir la producción porcina en la Argentina. La línea financia la compra de equipamiento, incorporación de genética, el tratamiento de residuos y la modernización de granjas.
Estos préstamos especiales fijan las cuotas en kilos capón y se abonan en pesos al valor del índice mensual de la carne de cerdo, lo que aporta previsibilidad a los productores porque siempre tienen que asignar la misma cantidad de producción al compromiso de pago.
El financiamiento se otorga en UVA con una tasa de interés fija anual del 8% y un monto máximo de hasta $800 millones por solicitante. El plazo es de 60 meses, con la posibilidad de extenderse a 84 meses: si el precio del kilo capón baja, al productor se le extenderá el plazo y si el precio sube, se le reducirá. Ante cambios de precio, la variable de ajuste siempre es el plazo.
Los requisitos para acceder: ser una MiPyME dedicada a la producción primaria de cerdos con Certificado PyME vigente y tener una antigüedad mínima de dos años.
En los últimos 10 años el sector porcino nacional creció a una tasa promedio del 6%. En 2024 alcanzó un récord de 8,3 millones de cabezas faenadas y una producción de 785.778 tn (lo que representa un aumento del 3,1% respecto al 2023).
En esa dirección, si comparamos faena y producción para enero-abril 2025 respecto al mismo período de 2024, el crecimiento fue de un 3,4% (con 2.663.998 cabezas) y de un 1,4% (con 246.556 tn), respectivamente.
Asimismo, el consumo interno de carne de cerdo también crece a una tasa sostenida desde hace varios años y constituye todo un récord en la actualidad, al pasar de 10 a 18 kg por habitante.
